:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/elcomercio/JR3XADDXXFAHJKMA7XWOKNF2LU.jpg)
Leslie Salas
Los proveedores de servicios electrónicos están en la cuenta regresiva. Y es que solo tienen hasta el 1 de julio próximo para implementar la certificación ISO 27001, que garantiza y asegura la confidencialidad e integridad de los datos de la información de las empresas que hoy emiten comprobantes electrónicos, entre otros.
Kenneth Bengtsson, presidente ejecutivo de Efact, compañía de facturación electrónica, recuerda que esta es una obligación que la Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria (Sunat) promovió desde el 2015, pero que por diferencias circunstancias se postergó.
“Cumplir con esta norma es muy importante, debido a que los proveedores de servicios electrónicos manejamos información confidencial y sensible de los clientes al tratarse de documentación relacionada con aspectos tributarios y económicos, como ingresos, egresos y data de sus proveedores, etc.”, afirma.
Asegura que de esta manera las empresas, especialmente las pequeñas y medianas empresas (pymes), se sumarán más rápido al proceso de digitalización de comprobantes de pago, puesto que tendrán más confianza acerca del manejo de su información.
No obstante, revela que de los casi 130 proveedores autorizados u homologados por la Sunat para dar el servicio de facturación electrónica y que figuran en su portal, solo el 21% tiene la certificación ISO 27001.
En recuperación
Bengtsson recuerda también que todas las empresas, personas naturales o jurídicas deberán entregar comprobantes electrónicos: factura, boleta, notas y tickets de manera obligatoria a partir del 1 de enero del 2022.
Estima que son alrededor de un millón de contribuyentes, entre empresas y personas naturales, que aún no se suman a la facturación electrónica. Este proceso de incorporación está avanzando al ritmo esperado, considerando que el Perú es un país donde hay un cierto escepticismo a las nuevas tecnologías y donde existe mucha informalidad.
El proceso de adaptación de las empresas, especialmente pequeñas o micro, es rápido, puede tardar de un día a otro.
De otro lado, comenta que la pandemia ha hecho que las empresas emitan una menor cantidad de comprobantes de pago.
“El año pasado cerramos a un 80% de los niveles prepandemia y eso se mantiene hasta ahora, pese a que se han incorporado más contribuyentes (alrededor de 2,000 empresas más desde la pandemia). Me parece complicado llegar este año a los niveles del 2019, más aún considerando que todavía se mantienen algunas restricciones. Además, las personas están espaciando más la frecuencia de compras, aunque es probable que el gasto haya aumentado”, precisa.
En el caso de Efact manifiesta que hasta abril han registrado un crecimiento de 12% (con un total de 2,000 empresas) y proyectan llegar a un 25% en el consolidado del año.