El banco Scotiabank previó que las cuentas externas tendrán una relativa estabilidad en el cuarto trimestre del 2015, lo que permitiría mantener las Reservas Internacionales Netas (RIN) en alrededor de US$ 62,000 millones.
Por su parte, la Balanza en Cuenta Corriente (BCC) registraría una ligera recuperación sustentada en un menor déficit de la balanza comercial, señaló el analista senior del Departamento de Estudios Económicos del banco, Pablo Nano .
En ese sentido, previó que los mayores volúmenes de cobre y harina de pescado, ante la apertura de la segunda campaña de pesca de anchoveta, permita más que compensar la tendencia negativa en el precio de minerales e hidrocarburos.
Esto último debería influir también en las menores utilidades de las empresas extranjeras en el cuarto trimestre del 2015, generando menor salida de capitales por renta de factores.
La cuenta financiera continuaría generando un flujo de capitales suficiente para seguir financiando el déficit de la BCC, indicó en el Reporte Semanal del banco.
En ese sentido, continuaría el ingreso de capitales dirigidos al Sector Público producto de una nueva colocación de bonos globales por 1,100 millones de euros registrada en octubre.
Asimismo, previó un flujo positivo de capitales dirigidos al sector privado, aunque a un ritmo menor al reportado en el tercer trimestre del presente año, pues habría un menor ritmo de reinversión de utilidades, en línea con la tendencia decreciente de estas últimas, y porque no se repetirían los atípicos aportes de capital que se registraron durante el tercer trimestre del 2015.
Durante el tercer trimestre del año, las cuentas externas mostraron una evolución positiva, lo que se reflejó en una ganancia de RIN de US$ 1,422 millones, su mayor variación desde el primer trimestre del 2013.
La BCC registró su segundo déficit más elevado en lo que va del 2015, debido básicamente a un deterioro de la balanza comercial como consecuencia de la caída en el precio de los minerales y del petróleo y por las menores transferencias corrientes pues en el tercer trimestre del 2014 se registró ingresos extraordinarios en este rubro.
Las exportaciones cayeron 19% debido a la caída en el precio de productos tradicionales como petróleo, cobre y oro, en un contexto en el cual el volumen exportado se mostró estancado (ver gráfico) pues los mayores envíos de cobre fueron contrarrestados por el menor volumen exportado de textiles y productos pesqueros.
Por su parte las importaciones retrocedieron 11%, lideradas por el menor valor de las importaciones de insumos. Esta evolución se debió a la significativa caída en el precio del petróleo y de commodities agrícolas como trigo, maíz y soya.