(Bloomberg).- El pasó el verano publicando una avalancha de documentos sobre el pero no dijo nada sobre el único tema con más probabilidades de desbaratar un acuerdo: cuánto dinero le pagará a la Unión Europea.

Los inversores lo notaron. El Reino Unido hizo concesiones a la UE en algunos de sus documentos de posición, pero la libra esterlina cayó el miércoles hasta su nivel más débil frente al euro desde octubre. Si ignoramos el súbito desplome de ese mes, la libra se encontraba en su nivel más bajo en ocho años.

"Lo que nos preocupa es que al parecer las negociaciones por la factura a pagar llevarán un poco más de tiempo", dijo Mike Amey, administrador de fondos en Pacific Investment Management Co. de Londres, a Bloomberg Television. "Si no llegamos a un acuerdo sobre la cuenta, ni siquiera avanzamos a la siguiente ronda".

La semana próxima marca el inicio de ocho semanas cruciales que determinarán cómo abandonará Gran Bretaña a su socio de cuatro décadas, en tanto los líderes de la UE dictaminarán en octubre si la primera ministra del Reino Unido, Theresa May, hizo lo suficiente por destrabar las discusiones sobre un futuro acuerdo comercial.

Las negociaciones se reanudan con ambas partes aún malquistadas con respecto a las facetas más fundamentales de la separación, desde cómo tratar a los europeos que se han radicado en el Reino Unido hasta cómo abordar el acuerdo financiero que establecerá el tipo de disposición indispensable para avanzar.

Hay una combinación de frustración y perplejidad en el enfoque del Reino Unido y su renuencia a abordar algunas de las mayores cuestiones, según dos diplomáticos de la UE allegados a las negociaciones por el Brexit.

En julio, el gobierno de May reconoció que de los 46 temas correspondientes nada más que a los derechos de los ciudadanos, había convergencia únicamente respecto de 22. La UE es menos optimista que los funcionarios británicos con respecto a las chances de un acuerdo para octubre, y los observadores del Brexit tienden a coincidir con Bruselas.

"Octubre quizá sea un poco optimista para empezar negociaciones comerciales totales", dijo Mats Persson, ex funcionario del gobierno del Reino Unido que actualmente es director de comercio internacional en EY. "Esto se reducirá en gran medida al dinero, si se puede llegar a algún acuerdo de principio sobre el dinero".

El Reino Unido se niega a que lo arrastren al dinero como estrategia deliberada de negociación, dijo una persona al tanto de su estrategia. Eso genera la posibilidad de que el asunto se resuelva a último momento con May hablando cara a cara con los otros 27 líderes en una cumbre interminable.

El secretario británico del Brexit, David Davis, está analizando la posibilidad de negarse a llevar a cabo una conferencia de prensa regular conjunta con el negociador principal de la UE, Michel Barnier, y acusará al bloque de ser poco razonable y terco, informó The Sun, sin decir cómo obtuvo la información.

Los analistas estiman que la UE quiere que el Reino Unido pague una abultada factura de 100,000 millones de euros (US$ 120,000 millones), sobre la base principalmente de los compromisos previos del país en relación con el presupuesto central del bloque.