El nuevo director ejecutivo de ProInversión debe ser un profesional que no se deje presionar por el gobierno. (Foto: El Comercio)
El nuevo director ejecutivo de ProInversión debe ser un profesional que no se deje presionar por el gobierno. (Foto: El Comercio)

Hace pocas semanas, Alberto Ñecco renunció a la dirección ejecutiva de ProInversión. En su lugar, se encargó a Diego Arrieta, actualmente jefe de la Oficina de Normalización Previsional (ONP) las funciones que Ñecco ostentaba. El hecho ocurrió tras postergarse por cuarta vez la firma del contrato para la PTAR Titicaca, documento que finalmente se suscribió el 30 de octubre pasado.