El FMI resaltó la implementación de la facturación electrónica en el Perú, pues permitirá reducir la evasión del IGV e incrementar la recaudación de este impuesto. Incluso, sostuvo que esta medida aumentó las ventas, compras y valor agregado reportados en las pequeñas empresas en el primer año después de la adopción. Estas compañías también demuestran pagos de IGV más de 5% más altos en el primer año después de la adopción.