La prescripción adquisitiva es una figura legal que le permite a una persona adquirir la propiedad de un inmueble mediante la posesión continua del mismo de manera pública, continua, pacifica y actuando como propietario por 10 años, o, si se hace de buena fe, es decir, creyendo que la propiedad realmente es suya, habiéndola adquirido de alguien que decía ser el propietario, y parecía serlo, luego de solo 5 años.