Tras su reciente caída, el precio de los arándanos podría recuperarse ligeramente en los próximos meses, según las proyecciones de la Asociación de Productores de Arándanos del Perú (Proarándanos). El presidente del gremio, Daniel Bustamante, consideró que el descenso se debe a la mayor oferta peruana y a una reducción de la capacidad adquisitiva en los mercados del exterior.
“La oferta del Perú está creciendo a un ritmo de 40% anual, y por supuesto que eso tiene un impacto en el mercado. Si a ello le sumamos la problemática del COVID-19, que ha reducido la capacidad de gasto y ha ocasionado el cierre de hoteles y restaurantes, se acentúa el problema. Sin embargo, la caída no ha sido tan dramática, lo que demuestra que los arándanos peruanos tienen una posición sólida en el mercado”, indicó Bustamante a gestion.pe.
También indicó que los precios guardan una relación inversa con los picos de producción del fruto en el país, pues el periodo principal de cosecha va de agosto a enero. El precio promedio de exportación por kilogramo de arándanos cayó 20% en octubre, en relación con el mismo periodo del año anterior, mientras que en setiembre el descenso había sido de 32% y de 18% en agosto, según cifras publicadas por el portal Agrodata Perú.
“Estos picos ya empezaron a presentar una tendencia decreciente. Octubre es el mes en el que más producto ha llegado al mercado, bastante más que el año pasado, por supuesto. Podría haber una ligera recuperación (en los próximos meses), pero eso también dependerá de cómo venga la oferta de Chile. No creo que los precios caigan más de lo que ya cayeron, podrían mantenerse o presentar un ligero incremento”, añadió.
De acuerdo con las proyecciones preliminares de la asociación, los envíos al cierre de este año habrán crecido 40% en volumen, en relación con el mismo periodo del año pasado, y entre 10 y 20% en valor.
Ante el incremento de la oferta peruana, los exportadores tienen gran expectativa en la apertura de nuevos mercados en el Asia. Las negociaciones más avanzadas que lleva a cabo el Servicio Nacional de Sanidad Agraria del Perú (Senasa) corresponden a los mercados de Corea, Japón, Taiwán, Malasia, Indonesia y la India. Sin embargo, los procesos se han obstaculizado por la imposibilidad de que los inspectores asiáticos viajen hacia el Perú durante la pandemia.
Hace pocos meses, el representante comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer, solicitó una investigación para determinar si las importaciones de arándanos afectan a los productores locales. Este proceso podría conducir al establecimiento de nuevos aranceles de salvaguarda sobre este fruto.
Al respecto, Bustamante indicó que Proarándanos junto con la embajada de Perú en EE.UU., importadores y distribuidores del fruto han formado una coalición para demostrar que “las importaciones de arándanos han contribuido a incrementar la demanda, puesto que la mayor parte de la fruta importada llega cuando Estados Unidos no la está produciendo”.