Redacción Gestión

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El ministro de Transportes y Comunicaciones, Carlos Paredes, y aprovechó para criticar al gobierno de Alan García que quiso entregar este proyecto con un diseño perjudicial para el Estado.

Paredes contó que en las primeras semanas del gobierno de Ollanta Humala se iba a concesionar el referido aeropuerto, pero su gestión la detuvo de inmediato por dos razones:

1) "Se modeló como una concesión autosostenible, partiendo de la premisa de que el TUUA (impuesto por uso del aeropuerto) sería irracionalmente más caro que en el Jorge Chávez de Lima. Eso implicaba que no requería recursos del Estado ni estudios de inversión, por lo tanto, se podía adjudicar más rápido para la foto".

2) "Se pretendía otorgar la concesión sin haber adquirido los terrenos para el , cometiendo el mismo error que en Lima. Si eso hubiera ocurrido, el Estado hubiera firmado un compromiso con el concesionario y después sabe Dios a qué precio se hubieran tenido que pagar por los terrenos y probablemente no a las comunidades propietarias".

¿Cómo procedió el actual gobierno? Sobre el primer punto, el ministro Paredes informó que sinceraron el modelo de concesión y a partir de un TUUA razonable y competitivo para el aeropuerto del Cusco confirmaron que "tenía que ser cofinanciada" para hacerla realidad. Eso obligó a realizar los estudios de preinversión, configurar su viabilidad y convocar a un concurso.

Respecto al segundo punto, Paredes explicó que optaron por adquirir los terrenos y cuando estos hayan pasado a poder del Estado, recién adjudicar la concesión. Y eso se hizo realidad con el apoyo del Gobierno Regional de Cusco y las comunidades de Chinchero.

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"La concesión del Aeropuerto Internacional de Chinchero de Cusco es un ejemplo de cómo estamos gestionando las concesiones en este Gobierno", finalizó el ministro de Transportes y Comunicaciones.