(Bloomberg).- El índice accionario de referencia del Reino Unido está a punto de perder parte de su carácter extranjero.

FTSE Russell, de London Stock Exchange Group Plc, propone cambios a la forma en que asigna nacionalidades a las empresas en sus índices de acciones globales. Entre esas referencias está el índice FTSE 100, de 2 billones de libras esterlinas (US$ 2.5 billones).

Como los inversores pasivos deben igualar la composición de los índices que monitorizan, muchas veces los cambios los obligan a comprar o vender. FTSE Russell dice que la mayoría de los fondos de acciones concentrados en el Reino Unido monitorizan sus índices.

Los criterios incluirán el lugar de constitución de la sociedad, la sede, los activos, los ingresos y su cotización primaria, según una encuesta de consulta que concluye este miércoles.

Las nuevas normas podrían terminar excluyendo del FTSE 100 a la constructora CHR Plc, con sede en Dublín; a la minera mexicana Fresnillo Plc; y a la operadora de viajes alemana TUI AG, según indicaciones iniciales. Las tres acciones representan un 1.7% de la referencia británica.

A su vez, Liberal Global Plc e IHS Markit Ltd., que cotizan en Estados Unidos, podrían ser elegibles para el FTSE 100.

"Quizás sea lógico que acciones que claramente no son británicas no permanezcan en el índice", escribieron analistas de Société Générale encabezados por John Carson en una nota el martes por la noche. "Sin embargo, nos imaginamos que a la LSE y a las propias compañías no les entusiasme que estas últimas pierdan representación en índices importantes".

En el índice FTSE 250, los cambios afectarían a la distribuidora de televisión y cine canadiense Entertainment One Ltd.; a Hochschild Mining Plc, con sede en Perú; a NMC Health Plc, de Emiratos Árabes Unidos; y a la rusa Polymetal International Plc. El índice FTSE Small Capitalisation podría perder a Lamprell Plc, que le quedaría a EAU.

En total, 49 miembros de la serie de índices FTSE Global Equity cambiarían de nacionalidad, según el proveedor de índices.

La revisión surge de la fusión efectuada en el 2015 entre FTSE y Russell —dos de las proveedoras de índices más grandes del mundo en esos momentos— que históricamente utilizan métodos distintos para determinar la nacionalidad. FTSE Russell pretende aplicar los cambios en junio, pero los analistas de Société Générale sostienen que es "demasiado pronto".

"Sentimos que toda consulta o modificación se debería hacer según la demanda o necesidad de los inversores y no estar impulsada por la unión de dos proveedores", escribieron.