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Luego de dos años de poca variación en el precio, el mercado de gas natural de Estados Unidos podría estar finalmente a punto de ver algunos fuegos artificiales.

Nueve de los 10 operadores y analistas encuestados por Bloomberg News esta semana son alcistas respecto del combustible de calefacción a medida que se aproxima el invierno, cuando la demanda alcanza su punto máximo.

Si bien la mayoría espera que el gas se comercialice cerca de US$ 4 por millón de unidades térmicas británicas (o BTU, por sus siglas en inglés), tres proyectan que los contratos a futuro podrían dispararse a US$ 6 o más, un nivel no visto desde que el frío del Ártico cubrió el este de EE.UU. durante el "vórtice polar" del 2013 y 2014.

Las proyecciones dan señales de un momento crucial para el mercado de gas de EE.UU., que ha languidecido en un estrecho rango de cotización mientras la producción récord compite con el aumento del consumo.

Con las exportaciones ya en un máximo histórico y las nuevas terminales listas para enviar aún más gas natural licuado a compradores desde Brasil a Japón, el equilibrio se está inclinando hacia la demanda: las existencias están en el nivel estacional más bajo desde 2003, creando el riesgo de que las dificultades en el suministro de invierno puedan hacer subir los precios.

"Finalmente veremos algunos destellos", dijo en una entrevista telefónica Francisco Blanch, jefe de investigación global de productos básicos y derivados del Bank of America Merrill Lynch. "Ha sido un mercado muy aburrido. Si tenemos un clima frío sostenido en América del Norte con este impulso del GNL, veremos precios significativamente más altos".

El mercado ya está mostrando signos de inquietud por el suministro de invierno: los futuros subieron un 3.2% en setiembre para ubicarse en US$ 3,008 por millón de BTU, el mayor aumento para ese mes desde 2012. Un clima inusualmente frío puede afectar al este de EE.UU. en enero y febrero, según el pronóstico del invierno de Commodity Weather Group LLC.

El frío generalizado que congela los pozos de gas es "la receta para que esta cosa se dispare fuertemente al alza”, dijo por teléfono John Kilduff, socio fundador de Again Capital LLC, un fondo de cobertura de materias primas con sede en Nueva York. Él estima que los precios podrían alcanzar los US$ 6 o US$ 7 por millón de BTU en condiciones extremas, más del doble que el promedio de febrero pasado.

Desde que Cheniere Energy Inc. envió la primera carga de gas de esquisto desde su terminal Sabine Pass en Louisiana hace más de dos años, las exportaciones de gas de EE.UU. han limitado los volúmenes que fluyen hacia el almacenamiento subterráneo, al tiempo que ponen a la nación en camino para competir con Catar y Australia por el dominio mundial del GNL.

Más cargamentos están en camino y nuevas plantas de producción en Luisiana, Texas y Georgia comenzarán a funcionar antes de fin de año. Mientras tanto, el gas de EE.UU. se está enviando a México a través de un gasoducto a una velocidad récord.

La demanda interna también está en aumento. Según muestran los datos de Bloomberg, las centrales eléctricas están quemando la mayor cantidad de gas en términos estacionales desde al menos 2012, ya que el suministro de esquisto barato fomenta el cierre de los generadores a carbón y los reactores nucleares.

Pero sin una onda polar, la producción récord está preparada para mantener los precios del gas bajo control. Según datos de la Administración de Información de Energía de Estados Unidos, la producción en el primer trimestre promediará 90,480 millones de pies cúbicos por día, un aumento del 7.4% en comparación con el año anterior. Además, la expansión de la producción de las prolíficas cuencas de esquisto de la nación podría ayudar frente a cualquier aumento en la demanda.

La producción desde los Apalaches a la Cuenca Pérmica -ubicada entre Texas y Nuevo México- puede ser suficiente para llenar los ductos, incluso si el almacenamiento es limitado, dijo Teri Viswanath, director gerente de gas natural de S&P Global Platts en Nueva York. La puesta en marcha de los gasoductos del este de EE.UU., incluido Atlantic Sunrise de Williams Co., ayudará a entregar el combustible a los principales mercados.

Todo se reduce al clima invernal: mientras que el frío intenso haría subir fuertemente los precios del gas, un período cálido podría hacer que los futuros caigan un 30% o más a US$ 2 por millón de BTU, dijo Kyle Cooper, consultor de ION Energy con sede en Houston.

"Hay un poco de ansiedad sobre qué tipo de invierno vamos a tener", dijo Blanch del Bank of America. Si las temperaturas en otoño son más bajas de lo normal, "la gente estará bastante nerviosa para Navidad".

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