Bloomberg.- La dependencia mutua de las empresas de oleoductos y las refinadoras está quedando en evidencia con los estragos que está causando la tormenta tropical Harvey en la Costa del Golfo, lo que pone en riesgo el auge de la producción de esquisto en Estados Unidos.

Debido a que varias refinerías en la región han cerrado por la tormenta, los oleoductos tienen menos lugares para suministrar el petróleo que transportan desde los prolíficos yacimientos en la parte occidental de Texas.

A su vez, cuando los oleoductos se cierran, las refinerías aún abiertas tienen menos petróleo para procesar. En última instancia, los productores pueden encontrar su petróleo varado debido a los límites en la ruta de la costa.

Unos cuantos días más no es un problema, según Libby Toudouze, socia de Cushing Asset Management. Pero si los cierres de la Costa del Golfo continúan en la semana que viene, podría desatar un efecto en cadena en toda la industria, agregó.

"Si no hay lugar a dónde ir, no se puede acumular más crudo en la línea", dijo Toudouze en una entrevista telefónica.

La refinería de Marathon Petroleum Corp. en Texas City, con una capacidad de 451,000 barriles por día, podría verse obligada a detener la producción en varios días porque se está quedando sin crudo, dijo el lunes una fuente al tanto de las operaciones. Su petróleo viene a través de Magellan Midstream Partners LP, que suspendió el domingo el uso de su oleoducto en la zona.

Magellan no respondió inmediatamente a una solicitud de comentario. Marathon se negó a comentar sobre las operaciones en su planta.

Aunque los cierres no afectan el petróleo producido costa afuera en el Golfo de México, los productores de las cuencas Eagle Ford y Permian sentirán en algún momento el golpe si las refinerías y oleoductos que sirven el área de Houston – el corazón de la industria petrolera estadounidense – no pueden retomar rápidamente el ritmo de operaciones, dijo Rob Thummel, director gerente de Tortoise Capital Advisors LLC.

"Cuanto más larga sea la duración, vendrán más problemas de interrupciones", dijo Thummel por teléfono. "Realmente tenemos que esperar y ver."

Aunque Harvey se retiró al Golfo de México el lunes, se proyecta que recupere fuerza antes de volver a la frontera entre Texas y Louisiana, informó el Centro Nacional de Huracanes. El área cercana a la línea de Louisiana tiene 1,65 millones de barriles diarios de capacidad de refinación, incluyendo la planta Beaumont de Exxon Mobil Corp., según Andy Lipow, presidente de Lipow Oil Associates LLC.

Ya la instalación de Beaumont ha bajado su ritmo de operaciones debido a las inundaciones y se dice que Motiva suspenderá operaciones el martes, según fuentes.

Si Harvey causa que se detengan operaciones en Louisiana, hasta un 30% de la capacidad de refinación de EE.UU. podría quedar fuera de línea, de acuerdo a una nota de Tudor Pickering Holt & Co. a clientes. En ese caso, las interrupciones podrían durar de una a dos semanas, dijo la nota.

Mientras tanto, las refinerías en otras partes del país no afectadas por la tormenta están haciendo su agosto.

HollyFrontier, que opera a lo largo del Medio Oeste de EE.UU. y las Montañas Rocosas, lideró las ganancias, al subir hasta 9.1%.

Al mismo tiempo, el diferencial de gasolina, una medida aproximada de la ganancia de procesar crudo en combustible, subió hasta 18% el lunes, el mayor rango desde febrero, lo que implica mayores márgenes para las refinerías que todavía están operando.