Se debe mitigar los efectos de la reducción de ingresos por la menor cotización del cobre. (Foto: Andina)
Se debe mitigar los efectos de la reducción de ingresos por la menor cotización del cobre. (Foto: Andina)

Para el cobre, la mayor tensión comercial entre Estados Unidos y China está desplazando en importancia a las crecientes amenazas al suministro en Chile, uno de los principales exportadores.

Los trabajadores de la mina Escondida votaron decididamente a favor de ir a la huelga, si la propietaria, BHP Billiton Ltd., no mejora su oferta salarial, dijo el sindicato el miércoles. La paralización en la mina Caserones podría comenzar el próximo 7 de agosto.

Al mismo tiempo, los trabajadores de Chuquicamata, propiedad de Codelco, amenazan con bloquear el acceso a la mina, si la administración no responde a sus demandas.

En un año récord de negociaciones colectivas en la industria minera chilena, que incluye a la principal mina de Codelco, el Teniente, los inversores podrían estar subestimando el riesgo que las huelgas suponen para el suministro, mientras las crecientes tensiones comerciales dominan los titulares.

En julio, los precios registraron su mayor caída mensual desde finales del 2016, a medida que los administradores de activos aumentaron sus apuestas bajistas por el metal a una cifra récord.

“Los fundamentos no son tan negativos como sugiere el precio”, dijo Darwei Kung, gestor de US$ 3,400 millones de activos de DWS Enhanced Commodity Strategy Fund.

“Hay varias medidas que el gobierno chino puede activar para reducir el impacto (del conflicto comercial) en la economía. Estamos más preocupados por el impacto que las posibles huelgas puedan tener en el suministro”.

El año pasado, la paralización de 44 días en Escondida redujo la producción de la mayor mina de cobre del mundo, influyó a un déficit a nivel mundial y llevó al metal a su mayor repunte anual en siete años.

Tras el rechazo del 84% de los trabajadores a la oferta final de la empresa y su apoyo a una huelga, el sindicato está enviando un mensaje a la empresa: aunque sea doloroso, los empleados están listos para paralizar las actividades, con tal de no perder sus beneficios.

El sindicato afirma que ha ahorrado unos 550 millones de pesos (US$ 864,000) para financiar los costes durante la paralización, dijo Patricio Tapia, presidente del principal sindicato en Escondida.

“Si bien las huelgas son un soporte para el precio del cobre, se habla mucho la desaceleración en China”, dijo Geordie Wilkes, jefe de investigación de Sucden Financial. “No creo que sea tan determinante a favor de un alza, como lo sería si hubiera una fuerte demanda en China, que es el mercado clave”.

El índice industrial oficial en China se desaceleró en julio, en respuesta a una caída de pedidos para nuevas exportaciones, en una señal de que las tensiones comerciales con Estados Unidos están afectando la demanda por productos chinos.

“El tema de mayor impacto ahora sigue siendo la guerra comercial”, dijo Oliver Nugent, estratega de ING Bank NV en Ámsterdam. “Es poco probable que la huelga dure tanto como para alterar nuestras proyecciones originales. El mercado de metal refinado está bien equilibrado para este año”.