Goldman Sachs redujo, además, su panorama de crecimiento de la demanda global de crudo a 1.3 millones de bpd en el 2020, desde la previsión anterior de un alza de 1.4 millones de bpd.
Goldman Sachs redujo, además, su panorama de crecimiento de la demanda global de crudo a 1.3 millones de bpd en el 2020, desde la previsión anterior de un alza de 1.4 millones de bpd.

redujo su pronóstico sobre el crecimiento de la producción de hidrocarburos no convencionales de Estados Unidos en el 2020 y disminuyó ligeramente su estimación en torno al aumento de la demanda mundial de petróleo.

La correduría dijo que ahora prevé que la producción de suba en 700,000 barriles por día (bpd) en el 2020, una baja respecto de la estimación anterior de un alza de 1 millón bpd, e inferior al avance de 1.1 millones de bpd del 2019.

Goldman Sachs redujo, además, su panorama de crecimiento de la demanda global de crudo a 1.3 millones de bpd en el 2020, desde la previsión anterior de un alza de 1.4 millones de bpd.

También indicó que espera un crecimiento de los suministros de los principales países productores que no pertenecen a la OPEP, sin incluir el esquisto, de 1.4 millones de bpd en el 2020, una cifra que caería abruptamente a 200,000 bpd en el 2021 y de 300,000 bpd en el 2022.

Los inventarios de crudo de Estados Unidos subieron en 9.3 millones de barriles en la semana terminada el 11 de octubre, en comparación con las expectativas de un ascenso de 2.9 millones de barriles, ya que las operaciones refineras bajaron a un mínimo de dos años.

La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), Rusia y otros grandes productores, una alianza conocida como OPEP+, han implementado desde enero un acuerdo para recortar los suministros de crudo en 1.2 millones de bpd para elevar los precios en el mercado internacional.