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Estados Unidos elevó el martes su confrontación comercial con China al ordenar una investigación sobre láminas de aluminio importadas desde el gigante asiático por cientos de millones de dólares al año.

El departamento de Comercio anunció la investigación por posible dumping y subsidios indebidos en láminas de aluminio procedentes de China. Por primera vez desde 1991, Washington investiga por iniciativa propia y no a pedido de una compañía estadounidense.

"Estamos iniciando por nuestra cuenta el primer caso comercial en más de un cuarto de siglo demostrando una vez más que seguimos en constante vigilancia en apoyo al comercio libre, limpio y recíproco", dijo el secretario de Comercio, Wilbur Ross, en un comunicado.

"Desde el día uno, el presidente Trump dijo claramente que su administración no toleraría prácticas comerciales desleales y hoy damos otro paso en el cumplimiento de esa promesa", dijo Ross.

El año pasado Estados Unidos importó láminas de aluminio chinas por US$ 600 millones.

Ese producto, muy utilizado en la fabricación de artefactos, transporte y construcción, podría estar beneficiándose de subsidios y vendiéndose en el Estados Unidos a un precio menor al de su costo de producción, dijo el departamento de Comercio.

Esta decisión se suma a otras tomadas contra China; un país que Trump visitó este mes.

La administración estadounidense lanzó en abril una investigación sobre la producción de aluminio chino tras advertir que amenaza a un producto esencial para las necesidades de defensa de Estados Unidos y le aplicó cargas impositivas.