Los cambios políticos y los giros hacia la izquierda en Chile, Perú y Colombia podrían dificultar la aprobación de las reformas esperadas por los mercados, particularmente a nivel fiscal, dijo el estratega de Banco Bilbao Vizcaya Argentaria SA, Mario Castro.
La deuda soberana de Brasil y México está mejorando, en tanto los analistas de América Latina dicen que es probable que los bonos de los países andinos sigan teniendo un rendimiento inferior en momentos que los riesgos políticos plagan la región y debilitan la confianza de los inversores.
Perú celebró recientemente elecciones presidenciales, mientras que Chile tiene elecciones en noviembre y Colombia realizará una votación nacional el próximo año.
La posibilidad de una segunda rebaja a basura para Colombia representa un riesgo, pero es probable que la venta sea moderada en tanto los inversores han valorado la probabilidad de una rebaja, explica Castro.
Los bonos del Gobierno colombiano en moneda local, conocidos como Coltes, han estado bajo presión desde que S&P Global Ratings redujo la calificación del país en mayo.
“Una rebaja nunca es positiva y el panorama fiscal general podría afectar el desempeño de la curva de Coltes en el futuro, limitando el potencial alcista en lugar de desencadenar más liquidaciones”, dijo el analista.
Brasil luce mejor a corto plazo
Castro comentó que a Brasil le irá mejor en el corto plazo, mientras que México se verá favorecido en el 2022.
“De cara al futuro, podríamos ver una diferenciación positiva a favor de México por dos razones: la estabilidad en el largo plazo de los bonos del Tesoro de EE.UU. ayudará a aumentar el apetito por la curva mexicana y reducirá el ruido político en México en comparación con sus pares andinos”, anotó.
“Frente al 2022, soy más optimista sobre México debido a un menor riesgo político, menores riesgos provenientes de los bonos del Tesoro de EE.UU. y también vientos de cola provenientes del repunte de EE.UU.”, dijo el analista.
“La recuperación económica junto con un menor riesgo fiscal ayudará a los activos locales. Sin embargo, el análisis del ruido político del próximo año volverá a aumentar. Además, la situación fiscal está lejos de resolverse y volverá a afectar a los mercados en algún momento”.