Redacción Gestión

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Londres (Reuters).- Las acciones europeas cerraron en baja el lunes revirtiendo las ganancias iniciales de la jornada porque la preocupación sobre la salud de volvió a ensombrecer el ánimo de los inversores.

El índice de acciones europeas FTSEurofirst 300 cayó un 0.1% a 983.58 unidades, después de haber tocado un máximo intradiario de 993.21 unidades, impulsado por encuestas de opinión que sugirieron que los partidos griegos partidarios de un rescate financiero podrían lograr formar un Gobierno.

Pero el volumen fue flojo debido a que una serie de mercados europeos estuvieron cerrados, lo que acentuó las oscilaciones. En la jornada, se negoció en el FTSEurofirst 300 solo dos tercios del promedio móvil de 90 días.

El índice IBEX de España registró el mayor descenso entre los referentes europeos, de un 2.2%, presionado por las acciones de los pesos pesados Santander y BBVA, ante el creciente costo para las arcas públicas de apoyar a los prestamistas del país.

Una fuente del gobierno español dijo que el país podría usar deuda soberana para recapitalizar al atribulado prestamista Bankia, cuyas acciones descendieron un 13.4% el lunes y que solicitó la semana pasada financiación de rescate para cubrir las amortizaciones de hipotecas residenciales.

Los rendimientos de los bonos españoles a 10 añossubieron un 6.53%, su nivel más alto desde noviembre de 2011, antes de que el Banco Central Europeo inyectara en el sistema bancario préstamos baratos a tres años.

"La presión sobre los bancos españoles continua acrecentándose ya que la confianza deja el país, así que los inversores están comprensiblemente satisfechos con sentarse al margen", dijo Mike McCudden, a cargo de derivados en Interactive Investor.

"Ahora que Grecia se ve como una parte cada vez menor del panorama económico de la zona del euro, queda ahora que los líderes del Euro muestren unidad y ejecuten un plan audaz que ponga fin a la podredumbre", añadió.

Si bien los sondeos del fin de semana de alguna manera apaciguaron los temores de los inversores respecto a la posible salida de Grecia de la zona del euro y la drástica reacción en cadena que podría generarse en la región, los inversores de largo plazo optaron por quedarse al margen.

Las acciones líderes griegas, que se habían desplomado a niveles no vistos en más de 20 años, cerraron con un alza de casi un 7%.

Los estrategas de Societe Generale estimaron que una salida ordenada de Grecia de la zona del euro podría recortar un 10% del valor de las empresas líderes de la zona del euro, en tanto una salida desordenada podría ver al Euro STOXX 50 perder casi la mitad de su valor.

Goldman Sachs, mirando al amplio índice STOXX 600, pronosticó una caída de hasta un 12% en el caso de una salida unilateral y acelerada de Grecia de la zona del euro.