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(Agencias).- La Junta de Supervisores de la Autoridad Bancaria Europea (EBA) ha decidido que este año no someterá a los bancos europeos a los test de estrés que les hizo el año pasado, pero planea la próxima prueba en el 2016, anunció hoy.
La autoridad reveló que quiere centrarse este año en la transparencia de los bancos. Cabe resaltar que el capital de las instituciones financieras mejoró como resultado de los test realizados el año pasado, y por ello, justificó su renuncia a repetir las pruebas este año.
Los test de crisis pretendían revelar si los bancos contaban con capital suficiente para continuar con sus negocios en circunstancias difíciles.
La EBA debe considerar por lo menos un test de estrés cada año y si renuncia, justificar por qué lo hace.
El pasado otoño (boreal) la EBA, junto con una nueva autoridad de supervisión bancaria instalada por el Banco Central Europeo (BCE), realizaron test de estrés a los bancos para ver si tenían suficiente capital propio para afrontar la crisis.