FOTO 3 | 23 de marzo: En represalia por los aranceles sobre el acero y el aluminio, Pekín reveló una lista de 128 productos estadounidenses que quiere gravar con impuestos aduaneros entre 15% y 25% en caso de que fracasen las negociaciones con Washington. Entre ellos, figuran fruta fresca, carne de cerdo y aluminio reciclado: los productos estadounidenses involucrados representaban US$ 3,000 millones el año pasado.
FOTO 3 | 23 de marzo: En represalia por los aranceles sobre el acero y el aluminio, Pekín reveló una lista de 128 productos estadounidenses que quiere gravar con impuestos aduaneros entre 15% y 25% en caso de que fracasen las negociaciones con Washington. Entre ellos, figuran fruta fresca, carne de cerdo y aluminio reciclado: los productos estadounidenses involucrados representaban US$ 3,000 millones el año pasado.

El aluminio subía hoy y tocó su mayor nivel en casi siete años, en medio de crecientes preocupaciones por la oferta tras las sanciones de Estados Unidos contra Rusal, mientras que el níquel alcanzó un máximo de tres años por factores técnicos y temores a sanciones rusas adicionales.

A las 1231 GMT, el aluminio en la Bolsa de Metales de Londres cotizaba en US$ 2,521.5, un alza de 4.78%.

El cobre ganaba un 2.09% a US$ 7,020.5 la tonelada, en línea con el avance general en los metales básicos ante el mayor interés por el riesgo.

La minera global Rio Tinto señaló el miércoles posibles ajustes a la baja en su producción de aluminio en el 2018 tras las sanciones impuestas a su socio ruso Rusal.

Las preocupaciones sobre el impacto de las sanciones a Rusal, que comenzaron el 6 de abril, han elevado los precios de la aleación en hasta un 25% hasta ahora.

El níquel, en tanto, subía un 7.03% a US$ 15,215 la tonelada.

Algunos operadores y analistas estaban desconcertados por el aumento en el níquel, atribuyéndolo a factores técnicos, aunque el mercado ha estado temeroso recientemente de que las sanciones de Estados Unidos pudieran extenderse y afectar a la rusa Norilsk Nickel.

Agencias de noticias rusas informaron el miércoles que la administración del presidente estadounidense, Donald Trump, había informado a la embajada rusa en Washington que Estados Unidos no tenía planes inmediatos para imponer nuevas sanciones.

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