El primer puerto del país recibió 2,927 naves durante el 2020, informó la APN. (Foto: GEC)
El primer puerto del país recibió 2,927 naves durante el 2020, informó la APN. (Foto: GEC)

El Puerto del Callao logró movilizar 45′821,845 toneladas métricas en sus 13 terminales portuarios de uso público y privado a pesar de la pandemia y al estado de emergencia dictado por el Gobierno del Perú para hacer frente al avance de la , informó la Autoridad Portuaria Nacional ().

El organismo informó que el sistema portuario nacional se mantuvo operando los 365 días del 2020 para asegurar la continuidad de los servicios de transporte de carga, mercancías y actividades conexas en el país.

Del total de carga movilizada, 35′782,100 toneladas corresponden al movimiento de carga de los terminales portuarios de uso público como: el Terminal Norte Multipropósito; el Terminal de Contenedores-Muelle Sur y el Terminal de Concentrado de Minerales del Puerto del Callao. El resto fue movilizado en los terminales multiboyas de uso privado.

De acuerdo al Reporte Anual de Estadísticas de la APN, el primer puerto del país recibió 2,927 naves durante el 2020, siendo el portacontenedor el tipo de nave de mayor arribo (1,116); seguido de naves graneleras (627); tanqueros (591); Ro-Ro (151); de carga general (150); de pasajeros (12); otros (280).

Respecto al tipo de carga, el puerto del Callao recibió principalmente mercancía en contenedores (23′052,167 TM); granel líquido (11′648,350 TM); granel sólido (6′486,356 TM); granel sólido-minerales (2′506,081TM); carga fraccionada (1′923,614 TM); y carga rodante (205,277 TM).

Todo ello significó la descarga y embarque de productos como trigo, maíz, arroz, avena, legumbres, fertilizantes, alimento para animales, derivados de petróleo, alcohol, químicos, minerales, así como otras cargas en piezas sueltas y vehículos.

Los terminales multiboyas de Chancay-Blue Pacific Oils; de la Refinería La Pampilla–Repsol; Repsol Gas; Pure Bio Fuels; Tralsa; Quimpac–Oquendo; Sudamericana de Fibras; Zeta Gas Andino; y de Conchán–Petroperu sobresalieron por el movimiento de hidrocarburos como granel líquido, que permitió garantizar la demanda interna y las operaciones en el Puerto del Callao.