En medio de la crisis económica global, numerosas empresas han desvinculado a parte de su personal en los procesos de reestructuración emprendidos para adaptarse a la nueva situación. Ante la adversidad que afrontan, ¿cómo podrían estos exempleados aumentar sus posibilidades de reinsertarse de forma rápida al mercado laboral?
Silvana Cárdenas, Latam Right Management Practice Leader en ManpowerGroup, señala que el primer paso siempre debe ser el indagar por las razones del despido, pues bien podría tratarse de que se carece de ciertas habilidades para adaptarse a la nueva estructura de la empresa o podría deberse solo a un recorte de espacios. Ambas situaciones suponen retos distintos para el afectado.
En el primer caso, señala, se puede aprovechar esta información para precisamente desarrollar las habilidades que requiere el mercado. “He conocido casos en los que trabajadores que fueron desvinculados mejoraron tanto sus habilidades que la empresa volvió a contratarlos”, dijo a gestión.pe la especialista en empleabilidad.
Si el despido se debió a una reducción general del número de puestos de trabajo, lo que suele suceder en los sectores más golpeados por la crisis, a la persona le conviene tener claro qué habilidades ha desarrollado durante su experiencia laboral, pues podrían ser de gran provecho en otros giros económicos más próspero en la actualidad.
“Muchas personas que han sido desvinculadas están aprovechando sus habilidades en otros sectores. Antes se desempeñaban por ejemplo en turismo o el rubro de entretenimiento, que han sido los más afectados. Entonces, pueden aprovechar sus habilidades blandas y el conocimiento que han ganado para desempeñarse en las áreas de atención al público de otros rubros o en áreas administrativas”, comentó Cárdenas.
Acompañamiento
Ante el panorama incierto que se le presenta, lo ideal es que el exempleado reciba acompañamiento profesional, subraya, de coaches de carrera, por ejemplo, que los acompañen en el plano emocional y los asesoren para tomar las mejores decisiones en pro de su reinserción al mercado laboral.
En algunos casos las empresas que deciden desvincular a los trabajadores contratan los servicios de estos especialistas, pero también pueden ser aquellos quienes lo hagan, si está dentro de sus posibilidades.
“Un coach de carrera conoce el mercado y las nuevas habilidades que está buscando las empresas. Requiere una inversión pero esto le brindará los conocimientos y técnicas de networking que le permitan moverse en un mundo que de otro modo puede ser muy incierto”, acotó.
Por último, recordó que la mejor forma de mantenerse empleable es prepararse mediante cursos de acuerdo con la propia línea de carrera, que incluso pueden ser gratuitos; desarrollar una marca digital y mantenerse informado de cómo evoluciona el mercado.