FOTO 2 | 2. Descubre qué necesitas incluir

Los currículos deben tener seis componentes principales: un encabezado e información de contacto, resumen profesional, sección de habilidades, experiencia laboral, educación y experiencia adicional. 

Aquí hay un resumen breve de lo que es cada rubro y consejos sobre cómo aprovecharlos al máximo:

Encabezado e información de contacto: la parte superior de tu currículum (o la que sea la parte más destacada) que contenga tu nombre e información de contacto.

    Consejo profesional:  piénsalo dos veces antes de incluir tu dirección postal. Muchas veces es innecesaria y puede perjudicar tus posibilidades de calificar a una entrevista si vives lejos de donde está el puesto.

Resumen profesional: descripción breve de una a tres oraciones, que resume quién eres, qué haces y por qué eres una buena opción para el trabajo que buscas.

    Consejo profesional: evita las descripciones como "trabajador", "motivado" y demás términos vagos y genéricos. Céntrate en las habilidades y logros que te distinguen.

Habilidades: una lista de las competencias clave que posees y que te ayudarán a hacer el trabajo que estás solicitando.

    Consejo profesional: ¿No te decides sobre qué habilidades incluir? Revisa la descripción del trabajo que buscas para ver qué talentos son las más importantes.

Experiencia laboral: una lista de los diferentes títulos que has obtenido, los lugares en los que has trabajado y los logros que ha logrado.

    Consejo profesional: al escribir estos puntos en viñetas, usa el formato STAR (Situación, Tarea, Acción, Resultado) para no solo describir lo que hiciste en un trabajo anterior, sino qué tipo de impacto tuviste.

Educación: detalles sobre el nivel de preparación que has alcanzado, dónde estudiaste y qué cursaste, entre otros.
FOTO 2 | 2. Descubre qué necesitas incluir Los currículos deben tener seis componentes principales: un encabezado e información de contacto, resumen profesional, sección de habilidades, experiencia laboral, educación y experiencia adicional. Aquí hay un resumen breve de lo que es cada rubro y consejos sobre cómo aprovecharlos al máximo: Encabezado e información de contacto: la parte superior de tu currículum (o la que sea la parte más destacada) que contenga tu nombre e información de contacto. Consejo profesional: piénsalo dos veces antes de incluir tu dirección postal. Muchas veces es innecesaria y puede perjudicar tus posibilidades de calificar a una entrevista si vives lejos de donde está el puesto. Resumen profesional: descripción breve de una a tres oraciones, que resume quién eres, qué haces y por qué eres una buena opción para el trabajo que buscas. Consejo profesional: evita las descripciones como "trabajador", "motivado" y demás términos vagos y genéricos. Céntrate en las habilidades y logros que te distinguen. Habilidades: una lista de las competencias clave que posees y que te ayudarán a hacer el trabajo que estás solicitando. Consejo profesional: ¿No te decides sobre qué habilidades incluir? Revisa la descripción del trabajo que buscas para ver qué talentos son las más importantes. Experiencia laboral: una lista de los diferentes títulos que has obtenido, los lugares en los que has trabajado y los logros que ha logrado. Consejo profesional: al escribir estos puntos en viñetas, usa el formato STAR (Situación, Tarea, Acción, Resultado) para no solo describir lo que hiciste en un trabajo anterior, sino qué tipo de impacto tuviste. Educación: detalles sobre el nivel de preparación que has alcanzado, dónde estudiaste y qué cursaste, entre otros.

Son varios los asuntos que se tratan en un , desde enumerar los logros profesionales, funciones y responsabilidades hasta describir las capacidades de uno como trabajo en equipo, trabajo bajo presión, comunicación, entre otros.

Pero, sin duda, hablar del siempre ha sido uno de los aspectos más incómodos al momento de obtener un empleo.

En Latinoamérica y en especial en nuestro país, existe un porcentaje muy bajo de profesionales con conocimientos para negociar su sueldo, debido a que es visto como un tabú o tema que causa vergüenza.

Asimismo, el error más común que se comete es brindar un valor exacto en lugar de dar un rango, lo que disminuye toda opción de .

Ante este panorama, a continuación cinco consejos claves para lograr obtener la deseada de acuerdo a Joseph Zumaeta, gerente de Aptitus.

1. Investigar sobre la empresa y el mercado: Hay que tener en cuenta que no todas las compañías son iguales, así que infórmate sobre la actividad de la organización, el tamaño, su facturación, número de empleados y el rubro al que pertenece, ya que pueden ser de gran ayuda para estimar un rango del puesto al que postulas. Por otro lado, sería ideal que conozcas también cuál es el habitual para la posición a la que estás postulando o cuánto pagan otras empresas por ese mismo puesto.

2. Dar rangos y no montos exactos: Antes de asistir a tu última entrevista es importante que hagas cuentas y fijes el sueldo que quieres obtener, lo recomendable es que se encuentre entre un 10% a 20% más de lo que ganas actualmente. Por ejemplo, si percibes S/30,000 al año, puedes decir que esperas ganar entre S/33,000 a S/36,000 anual, de esa manera al dar un rango tendrás más opciones de obtener el sueldo que anhelas.

3. Tener en cuenta otros beneficios: Si el que te ofrecen no cumple las expectativas, pero el puesto te interesa, entonces trata de negociar otros aspectos que pueden compensar, por ejemplo: tener flexibilidad de horarios, home office, más tiempo de vacaciones, oportunidades de capacitación, estudios, vales de consumo o bonos por desempeño.

4. Escuchar propuestas: Si tienes miedo de dar un monto o piensas que es muy alto, responde que estás abierta (o) a escuchar ofertas. De esa manera, tu entrevistador te revelará una cantidad y podrás aceptarla o aumentarla si crees conveniente.

5. Terminar diplomáticamente las negociaciones: Si las negociaciones no tienen el éxito esperado y decides rechazar la oferta laboral, recuerda que debes hacerlo con inteligencia, educación y siempre agradeciendo por el tiempo dedicado a tu persona en el proceso de selección.