FOTO 3 | 3. Busca referencias laborales y de carácter. Entrevista a los candidatos recomendados por personas a las que les tengas confianza. Pero aun así debes realizar tu propia verificación de los antecedentes del aspirante. En el caso de alguien que no cuente con una recomendación personal, necesitas buscar referencias.

No te conformes con las que están enlistadas en su currículum: busca ex compañeros de trabajo o colegas que puedan corroborar la historia laboral del solicitante y te den una idea de su carácter.

Aunque es necesario tomar precauciones cuando incorporas a alguien a tu empresa, mentir en los CVs no es común, especialmente en plena era de la transparencia de la información. Debido al alto índice de desempleo actual, algunas personas sienten que la única manera de hallar un trabajo –cuando han estado desempleadas por un tiempo– es hacer algo que saben que está mal. No obstante, ya sea por su integridad o por temor a ser descubierta, la mayoría de la gente no corre ese riesgo. (Foto: Difusión)
FOTO 3 | 3. Busca referencias laborales y de carácter. Entrevista a los candidatos recomendados por personas a las que les tengas confianza. Pero aun así debes realizar tu propia verificación de los antecedentes del aspirante. En el caso de alguien que no cuente con una recomendación personal, necesitas buscar referencias. No te conformes con las que están enlistadas en su currículum: busca ex compañeros de trabajo o colegas que puedan corroborar la historia laboral del solicitante y te den una idea de su carácter. Aunque es necesario tomar precauciones cuando incorporas a alguien a tu empresa, mentir en los CVs no es común, especialmente en plena era de la transparencia de la información. Debido al alto índice de desempleo actual, algunas personas sienten que la única manera de hallar un trabajo –cuando han estado desempleadas por un tiempo– es hacer algo que saben que está mal. No obstante, ya sea por su integridad o por temor a ser descubierta, la mayoría de la gente no corre ese riesgo. (Foto: Difusión)

Cuando un profesional ha sido desvinculado de un empleo y está en la búsqueda de uno nuevo, definitivamente, durante el proceso de selección tendrá que responder en las entrevistas: ¿a qué se debió su separación del empleo anterior?

Según haya sido la causa, el candidato debe prepararse para contestar a esa interrogante.

Al respecto, Manuel Cubas, presidente de Career Partners Perú, una de las firmas líderes en outplacement a nivel mundial, comparte pautas importantes.

Por un lado, mencionó que si la desvinculación fue resultado de una reestructuración por reducción de costos, venta o fusión de la empresa, por ejemplo, puede contestar: “salí de la empresa debido a una reestructuración cuyo objetivo era reducir los costos; mi nivel salarial, como resultado de mis logros, era más alto que lo que la empresa estaba considerando en la nueva estructura”.

Si le repreguntan, ¿si eras tan bueno, entonces, por qué saliste? Una buena respuesta sería: “En reestructuraciones, los líderes toman decisiones por más duras que sean y en este proceso, lo más importante era reducir costos”.

Por otro lado, si la razón es el desempeño, el especialista consideró importante tener en cuenta que en algunas empresas podemos tener excelentes resultados y en otras no.

“Esto no se debe a que seamos malos profesionales, sino a una falta de encaje con la cultura de la empresa o con el jefe. La respuesta al motivo de la salida, sería: Salí por una diferencia de opinión con mi jefe respecto al manejo de la estrategia del departamento, o salí por una falta de encaje entre mi personalidad y la de mi jefe”, recomendó el presidente de Career Partners Perú.

Respecto a la negociación salarial, cuando una persona ha sido desligada de un trabajo debemos considerar que, si bien hoy se valora más la contratación y retención del talento, en nuestro país aún existen muchas empresas que no lo hacen y eso impacta en estas situaciones.

“Habrá algunos empleadores que quieran aprovechar que estamos sin trabajo para ofrecernos menos de lo que valemos en el mercado; mientras otros, no querrán contratarnos por menos de lo que ganábamos por temor a que a los pocos meses consigamos otro empleo”, señaló Cubas.

En la primera situación, es importante considerar que un buen candidato generalmente está en varios procesos de entrevistas y hay que hacerlo saber a cada potencial empleador.

“Cuando el entrevistador sabe que somos valorados en el mercado por nuestros logros cuantificados y, por eso, estamos en varios procesos de selección, se interesará más en que nosotros trabajemos con él o ella. Además, debemos enfocarnos en explicar con números cuáles han sido nuestros logros en los empleos anteriores”, señaló.

En el segundo escenario, indicó que si los empleadores tienen el temor de que los dejemos si conseguimos un mejor sueldo en otro trabajo, nuestro enfoque debe estar en lo crucial que es para nosotros el encaje con la cultura de la organización y no tanto el sueldo.

Además, si se agrega valor a la empresa, el nivel salarial mejorará con el tiempo.

Sin embargo, precisó que si se trata de una empresa que paga en general sueldos bajos, lo mejor es seguir en otros procesos de selección con otras empresas que ofrezcan mejores niveles salariales.