Es difícil intervenir como líder y crear conciencia en el colaborador cuando este no cumple con las expectativas. Sin embargo, si se prepara y brinda un buen discurso, la conversación tendrá los resultados esperados.
Es difícil intervenir como líder y crear conciencia en el colaborador cuando este no cumple con las expectativas. Sin embargo, si se prepara y brinda un buen discurso, la conversación tendrá los resultados esperados.

Las conversaciones para obtener un feedback entre solo el líder y el colaborador, son delicadas. Los gerentes expertos aprenden a inspirar a sus empleados desde estas conversaciones. En cambio, los jefes novatos, tras la plática, los desmotivan y desaniman.

Y esta última situación cuesta dinero a la empresa, por eso, más de un tercio de gerentes evitan tener una conversación sobre el desempeño deficiente de sus colaboradores, señala Forbes.

Es difícil intervenir como líder y crear conciencia en el colaborador cuando este no cumple con las expectativas. Sin embargo, si se prepara y brinda un buen discurso, la conversación tendrá los resultados esperados.

Puede usar estos cuatro consejos que recopiló la revista de negocios para prepararse ante la siguiente conversación desafiante.

1. Sea empático
Antes de abordar el tema con su colaborador, tenga en cuenta los antecedentes de este, su historial laboral y los posibles factores externos que pudo influir en su bajo rendimiento. También, evalúe qué acciones pudo usted haber tomado antes para ayudar al colaborador a salir de esa situación.

Durante la conversación, practique la escucha activa: atender lo que la otra persona está diciendo sin prejuicios ni prejuicios.
Cuando es empático, reflexivo y escucha activamente, el empleado se sentirá respetado y más dispuesto a comunicarse sobre su desempeño o el problema en cuestión.

2. Practique su discurso
Si estuviera dando un discurso, probablemente lo prepararía y lo practicará en voz alta una y otra vez. La misma práctica es útil para prepararse para una conversación difícil.

Comience con un resumen de los hechos, luego diríjase al resultado que estos hechos han estado obteniendo y luego pregúnteles por su percepción de la situación.

3. Lidie con hechos
Antes de la reunión recopile todos los hechos por los cuales el empleado es citado. Si está discutiendo la necesidad de incluir a un empleado en un plan de mejora del rendimiento, tenga ejemplos documentados de las áreas en las que necesita mejorar.

Tener estos datos preparados de antemano hará que la conversación sea más fácil de respaldar si el colaborador toma una actitud a la defensiva.

4. Maneje el camino de la conversación
La conversación podría ser la oportunidad para vincular y nutrir mejor a su empleado. Respire tranquilamente antes de la reunión, y durante no levante la voz, incluso si el colaborador lo hace. Como líder, debe mantener la energía de la habitación. Si la reunión no va por el camino que desea, puede ofrecer completar la discusión en otro momento cuando las cosas están calmadas.