En la emergencia actual, las empresas están en necesidad de tener un respiro, debiendo cumplir con sus obligaciones de pago a trabajadores pese a no contar con ingresos.
Mientras tanto, el Ministerio de Trabajo no emite normas que flexibilicen las relaciones laborales, creando una mayor carga laboral para las empresas.
Frente a esta situación, expertos laboralistas señalan que las empresas pueden adoptar un conjunto de medidas para poder mejorar su situación económica sin la necesidad de despedir a sus trabajdores.
Cambio de jornadas
Germán Lora, socio del estudio Damma, comenta que la mejor opción que tienen las empresas es “reducir la carga laboral mediante acuerdos de partes”.
En ese sentido, Pamela Navarro, directora del área laboral del estudio PPU, comenta que los empleadores pueden acordar con sus trabajadores la reducción parcial de sueldo junto con la reducción de sus jornadas.
“La primera medida que las empresas pueden acordar es pagar a sus trabajadores el 50% de su sueldo regular y que trabajen de manera interdiaria mienteras realizan trabajo a domicilio”, comentó, indicando que luego se podrían compensar las horas no laboradas.
Además, una segunda opción es pagarle a los trabajadores un sueldo de 25% de su valor regular, y liberar al trabajador de la necesidad de compensar las horas no laboradas a futuro. Esta medida reduciría el problema de compensación de horas, señaló.
Diferir pago de sueldos
Navarro comenta que, como tercera opción, las empresas “podrían acordar con el trabajador diferir parcialmente la fecha de pago del sueldo. Las empresas podrían pagar el 35% de los sueldos de sus trabajadores el día de hoy, en parte con lo que le está dando el Estado como subsidio, y pagar el resto del sueldo del trabajador en una fecha futura”.
Lora comenta que esta opción es altamente viable, permitiendo que los trabajadores no pierdan sus ingresos. Y considera que pese a que es dificil que los trabajadores quieran acordar estas medidas, “la única forma de mantener el vínculo laboral” es mediante esta reducción de costos inmediatos.
En ese sentido, Navarro señala que ambos, la empresa y los trabajadores, deben entender que, de no acordarse estas medidas, las empresas van a quebrar y personas se quedarán sin trabajo.
Suspensión de labores
Jorge Toyama, socio del estudio Vinatea & Toyama, comenta que, como última opción, las empresas pueden recurrir a la suspensión perfecta de labores.
“Esta es una situación inédita que ha destruido negocios”, señala Toyama, agregando que “la otra opción es la liquidación de la compañía. La suspensión de labores es el mal menor”.
Considera que pese a que usualmente se requiere autorización del MTPE para poder realizar la suspensión de labores, las empresas que enverdad no tengan otra opción deben realizar esta suspensión y luego, si no les es dada la autorización, resolver el tema en el poder judicial.
Al respecto, Germán Lora comenta que esta es la única opción que puede tomar el empleador de manera unilateral.