(Foto: Grupo EC)
(Foto: Grupo EC)

El último domingo, dio cuenta del último reporte de control concurrente elaborado por la (a través del hito de control No 3929-2019-CG/APP-SCC) respecto a la Línea 1 del Metro de Lima.

Este órgano de control advirtió

La operatividad de la Línea 1 está en manos de GyM Ferrovías, integrada por Graña y Montero y Ferrovías Participaciones.

Si bien la uso en su pesquisa información del regulador para evidenciar la falta que estaría incurriendo el concesionario, –en comunicación con este diario– aclaró algunos detalles respecto a la información tomada en cuenta.

Por ejemplo, la precisó en su informe de control que el concesionario no ha venido cumpliendo con los mantenimientos preventivos programados en el plan de conservación 2019 –tal como consta en los informes remitido por Ositran– en la que se verifica, refiere, que algunos de los mantenimientos pendientes de ejecutar en el mes, son reprogramadas, generando que los mantenimientos se acumulen para los siguientes meses.

Sobre este punto y en lo referido al mantenimiento de las subestaciones, aclaró que el órgano de control emitió sus observaciones sin considerar la totalidad de la información proporcionada (el cuadro de las actividades ejecutadas, pendientes, adelantadas de meses posteriores y regularizadas de meses anteriores) y que solo ha considerado las actividades pendientes del mes, las mismas que –en efecto– son reprogramadas para su ejecución, pero en un tiempo que no superen los límites permisibles, conforme a las recomendaciones de los fabricantes. (Ver cuadro)

precisó –igualmente– que el consorcio lleva un control de estos cumplimientos (de las actividades pendientes) y que al mes de octubre los retrasos acumulados del plan de conservación no exceden del 9%.

El también manifestó –en relación al mantenimiento de la infraestructura de las estaciones que se encuentra establecido dentro del plan de conservación en el ítem de facility (servicio integral de limpieza)– se cumple de acuerdo a los avances mensuales. “La limpieza de los servicios higiénicos y pisos de las estaciones las realiza el concesionario de acuerdo al plan de limpieza”, arguyó a

Sobre este punto la dijo que se detectó que no se habrían realizado los mantenimientos preventivos según lo planificado en el plan de conservación y que incluso, en el periodo de enero a agosto de este año, no se evidenció la ejecución de los mantenimientos a la infraestructura de estaciones (servicios higiénicos, techos, señalización, reparación del sistema de iluminación, limpieza, entre otros).

Otro hecho que aclaró el Ositran está referido a la visita inopinada que como parte del informe de control concurrente realizó la Contraloría, el 4 y 7 de octubre, a los patios de taller de Villa El Salvador y maniobras de Bayóvar; así como a las Estaciones de Bayóvar, Miguel Grau, Atocongo y Villa María del Triunfo, en la que detectó una serie de deficiencias, desde la inoperatividad de los grupos electrógenos de emergencia; de las luces de emergencia, de las escaleras mecánicas, entre otros.

“Respecto de la visita de inspección técnica realizada (por la Contraloría) se ha remitido al concesionario las actas de inspección física, a fin que se atiendan las desviaciones detectadas durante la inspección, sobre el cual el concesionario ha solicitado una ampliación de plazo para culminar con la atención, el cual fue otorgada por Ositran hasta el 13 de diciembre de 2019”.

-Material rodante-

Respecto al material rodante (trenes), el regulador aclaró la afirmación usada en uno de los informes mensuales otorgados al órgano de control y que cita la en su informe de control concurrente, que dice: “(…) La forma como se está realizando la explotación de la flota de trenes del Metro de Lima y Callao, continuará generando problemas para realizar las diferentes rutinas de mantenimiento que el fabricante tiene estipuladas en el plan de mantenimiento, por lo que se está incurriendo en la falta de mantenimiento de los equipos y componentes de los diferentes sistemas del tren, que puede terminar en generar incidentes o accidentes de los equipos y por ende de los usuarios (…)”

En relación con la forma como se está realizando la explotación de la flota de trenes del metro de Lima y Callao, que es potestad y responsabilidad del concesionario, arguyó que su intención –conforme a su facultad de advertir desviaciones que podrían generar consecuencias futuras– era alertar al concesionario sobre la explotación llana que está efectuando, referido al control del kilometraje recorrido por cada uno de los trenes, a fin de evitar que durante los mantenimientos mayores de larga duración, no hayan coincidencias con los mantenimientos de varios trenes a la vez, situación que podrían afectar la disponibilidad de trenes para el servicio comercial.

Sobre este punto, agregó que el concesionario ya ha tomado en cuenta esta recomendación.