FOTO 5 | 5. Informar y comunicar
El último paso consiste en comunicar el desempeño de la compañía respecto a los ODS.
El medio más utilizado para ello es la memoria de sostenibilidad o informe de progreso, donde ha de reflejarse el compromiso general y la estrategia de la organización para contribuir al marco de Naciones Unidas.
Las empresas han de comunicar asimismo aquellos ODS alineados con la actividad principal de negocio, los compromisos públicos definidos y los indicadores establecidos para medir el progreso.
Y no se nos puede olvidar que, la contribución a los ODS por parte de las empresas puede ser además muy rentable, ya que existen potenciales oportunidades de negocio ligadas a lo que se conoce como la Agenda 2030.
El informe Better Business, Better World del WBCSD identifica hasta 60 oportunidades de negocio ligadas a los ODS en 4 sectores clave, representando el 60% de la economía mundial y, que de cristalizar finalmente, podrían proporcionar 12 billones de dólares al PIB mundial hasta el año 2030 y potencialmente el doble o el triple, además de crear 380 millones de empleos.
Por tanto, el argumento empresarial a favor de la sostenibilidad es sólido: genera nuevas oportunidades de negocio, promueve la innovación y mejora la reputación, los ODS permiten mejorar la relación de las organizaciones con sus empleados, clientes, inversores y resto de grupos de interés, aumentando la eficacia operativa, la motivación y la retención del talento.
¿Tienes alguna duda sobre lo bueno que es integrar los ODS en tu organización?
FOTO 5 | 5. Informar y comunicar El último paso consiste en comunicar el desempeño de la compañía respecto a los ODS. El medio más utilizado para ello es la memoria de sostenibilidad o informe de progreso, donde ha de reflejarse el compromiso general y la estrategia de la organización para contribuir al marco de Naciones Unidas. Las empresas han de comunicar asimismo aquellos ODS alineados con la actividad principal de negocio, los compromisos públicos definidos y los indicadores establecidos para medir el progreso. Y no se nos puede olvidar que, la contribución a los ODS por parte de las empresas puede ser además muy rentable, ya que existen potenciales oportunidades de negocio ligadas a lo que se conoce como la Agenda 2030. El informe Better Business, Better World del WBCSD identifica hasta 60 oportunidades de negocio ligadas a los ODS en 4 sectores clave, representando el 60% de la economía mundial y, que de cristalizar finalmente, podrían proporcionar 12 billones de dólares al PIB mundial hasta el año 2030 y potencialmente el doble o el triple, además de crear 380 millones de empleos. Por tanto, el argumento empresarial a favor de la sostenibilidad es sólido: genera nuevas oportunidades de negocio, promueve la innovación y mejora la reputación, los ODS permiten mejorar la relación de las organizaciones con sus empleados, clientes, inversores y resto de grupos de interés, aumentando la eficacia operativa, la motivación y la retención del talento. ¿Tienes alguna duda sobre lo bueno que es integrar los ODS en tu organización?

América Latina ocupa los últimos lugares del Ránking Mundial del Talento publicado  por el Centro Mundial sobre la (CMC), una evaluación anual de 63 economías en función de su capacidad de desarrollar, atraer y retener talento y que Suiza encabeza un año más.


Los países latinoamericanos tienen dificultades para desarrollar y retener el talento, además de compartir la problemática general de la fuga de cerebros y niveles relativamente bajos de inversiones en educación.


La excepción es Chile y en menor medida Argentina, aunque ambos países se sitúan en la mitad inferior del ránking, en el que ocupan los puestos 43 y 47, respectivamente.


"Salta a la vista que faltan reformas estructurales porque el talento en buena parte de los países latinoamericanos no tiene seguridad económica ni personal y carece de oportunidades", dijo el economista del CMC José Caballero, quien participó en la elaboración del listado.


Este Ránking Mundial, que se publica anualmente desde el 2014, tiene en cuenta tres factores principales: la inversión y desarrollo de una mano de obra con talentos, la capacidad de los países para atraer y retener talento extranjero y local y la preparación, que se refiere a las destrezas disponibles en el país.


Las dos tradicionales potencias regionales, Brasil y México, están en la cola de la lista, la primera en el puesto 58 y la segunda en el 61.


Si bien sus resultados son bajos en todos los factores, México presenta los problemas más agudos en la inversión y desarrollo de talento, que comprende los indicadores relacionados con la educación, la formación juvenil y elementos sociales, como las infraestructuras de sanidad.


Brasil, por su parte, muestra escaso atractivo para que el talento foráneo se plantee instalarse allí, así como una fuerza laboral que carece, de manera general, de los conocimientos que requiere el sector privado.


De Latinoamérica, el ránking del CMC también incluye a Perú, en el puesto 52, a Colombia en el 60 y Venezuela, que lo cierra en el 63.


La insuficiente inversión en educación no es necesariamente el motivo por el que la región está rezagada en términos de desarrollo y retención de talento, según Caballero.


Existe una tendencia a que las formaciones que predominan no necesariamente correspondan a lo que necesitan los países para poder insertarse en una economía global de constantes cambios, que requiere de conocimientos en las nuevas tecnologías y ser flexible.


El economista explicó que, en un estudio separado, el CMC intento establecer qué es lo que hace que el talento decida quedarse en ciertos países y lo que se descubrió sorprendió a muchos.


"Lo que encontramos es que eso va más allá del salario. El salario es importante, pero no tanto como se suponía, y que es fundamental el Estado de derecho y el progreso social, mediante la inclusión y la igualdad de oportunidades, indicadores en los que América Latina está en mala posición", comentó Caballero.


Otra necesidad de fondo es que mejore la seguridad personal, agregó el especialista.


Según el centro de investigación, con sede en la ciudad suiza de Lausana, cultivar una fuerza de trabajo educada y cualificada es fundamental para reforzar la competitividad de cualquier país y lograr una prosperidad de largo plazo.


Entre los resultados generales del ránking destaca que los países más exitosos son principalmente europeos de tamaño medio, con altos niveles de inversión en educación y calidad de vida.


El segundo lugar es para Dinamarca en un listado en el que los diez primeros puestos están dominados por países europeos, con la excepción de Canadá, que aparece en sexta posición.