La Comisión Multisectorial del Enfen reactivó el estado de alerta de La Niña costera, con una magnitud probable de débil y que se extendería hasta agosto del presente año. Ese fenómeno -según un experto- podría favorecer las condiciones para la pesca industrial de la anchoveta, aunque dificultaría la disponibilidad de otros recursos marinos destinados a consumo humano directo.
Según comunicado del Enfen, desde el punto de vista biológico, y de acuerdo con el escenario oceanográfico (que presenta La Niña), se prevé que la anchoveta en la región norte centro del litoral se presente dispersa, distribuyéndose, inclusive, por fuera de las 50 millas náuticas.
Además, refiere que los indicadores reproductivos de dicha especie continuarán con una baja actividad desovante, de acuerdo a su patrón histórico.
Pesca
Al respecto, Luis Icochea, exdirector de Imarpe e investigador de la Universidad Agraria La Molina, observó que las condiciones del mar que se están generando por el fenómeno La Niña, resultan favorables para el actual periodo de pesca del mencionado recurso.
Vale recordar que el 4 de este mes se inició esa primera temporada en la zona norte centro del mar territorial, con una cuota estimada de 2.7 millones de toneladas de biomasa disponible para la flota industrial que abastece de anchoveta para la fabricación de harina.
Icochea explicó que la baja temperatura que trae La Niña favorece la ocurrencia de vientos fuertes, que hacen aflorar, desde el fondo marino a la superficie, el alimento que nutre a la anchoveta, lo cual significa que habrá más abundancia de ese recurso, y que se distribuirá en forma más amplia y a poca profundidad en altamar.
Esa situación, añadió, facilitará las faenas extractivas por parte de unas 400 embarcaciones que participan actualmente en la actual temporada, y de la cual ya se ha capturado un 15% de la cuota antes mencionada.
Consumo humano
No obstante, según el mismo informe del Estudio Nacional del Fenómeno El Niño (Enfen), en este periodo proyectado de La Niña (hasta agosto del presente), recursos como el bonito y la caballa presentarán un alejamiento de la costa.
Esa situación, refiere Icochea, va a dificultar la captura de los citados recursos, así como del jurel por parte de la flota artesanal, y que se destina para consumo humano directo.
En corto
Sequía. Otro efecto que traerá La Niña (pronosticada hasta agosto) es la escasez de lluvias, según indicó Glicerio Canchari, especialista en agrometeorología del Senamhi, aunque señaló que ello no afectaría los cultivos en la sierra, debido a que estos entrarán en su periodo de descanso, en tanto para la costa hay disponibilidad de agua en los reservorios.