IE Business School

En los dos últimos años la ha tendido al alza en América Latina, aunque de forma moderada, por el mayor crecimiento económico, por la subida del petróleo y por la apreciación del dólar. Esto ha llevado ha llevado a los Bancos Centrales de la región a tener que subir los tipos de interés para contener la inflación, aunque eso pueda frenar el crecimiento económico.

"Para evitar que la inflación siga aumentando, los Bancos Centrales se han visto obligados a incrementar sus tipos de interés. Esta subida modera el consumo y la inversión ayudando a un mejor control de los precios", señala Juan Carlos Martinez-Lázaro, profesor del IE Business School.

No obstante, agrega que también tiene efectos negativos. "En los próximos trimestres, muchos Bancos Centrales de la región se verán en la disyuntiva de aplicar políticas monetarias ortodoxas, elevando los tipos de interés para mantener a raya la inflación a costa de reducir el crecimiento económico; o mantener su política monetaria inalterable para no frenar la actividad económica, con el riesgo de que la economía se desestabilice.

¿Por qué es importante mantener la inflación controlada?

Según Martínez, la inflación es conocida como el impuesto de los pobres, ya que provoca que las clases menos favorecidas vean cómo disminuye su poder adquisitivo al encarecerse su cesta de consumo básica. Por el contrario, quienes tienen capacidad económica pueden protegerse mejor al mantener su riqueza en activos que se revalorizan al calor de la subida de los precios.