(Foto:iStock)
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La Asociación Peruana de Energías Renovables (SPR) en su agenda sectorial advierte que, de no realizarse los cambios normativos necesarios para impulsar las energías renovables en el corto plazo, el país podría sufrir una grave crisis energética a partir del 2025 por la incertidumbre alrededor del proyecto SIT- GAS (Sistema Integrado de Transporte de Gas Zona Sur del País), según estudios del COES – SINAC.

Esto significa que, a partir del año 2025, el precio de la electricidad en el país se incrementaría considerablemente al utilizar una fuente de generación más costosa, como lo es el diésel.

Actualmente el precio de la electricidad en el mercado de corto plazo o “precio spot” oscila entre US$23 y US$ / MWh. Al utilizar diésel el precio del spot se incrementaría a US$180 y US$ 220 / MWh, lo cual tendría efectos en el sector industrial-minero nacional, así como en la ciudadanía, indicó el gremio.

Un incremento en el precio de la electricidad afecta a las pequeñas empresas, mineras, medianas y grandes industrias, que tienen un contrato sujeto a las variaciones del precio de la electricidad en el corto plazo.

“Esta incidencia también recae en los ciudadanos de a pie, dado que siendo la electricidad un insumo importante en el proceso productivo, al elevarse en costo, incrementa los precios finales de los productos”, subrayaron.

Cabe recordar que el incremento del precio de la electricidad, como consecuencia del uso de un diésel costoso, entre otros factores, es un escenario que ya se configuró en el 2008, año en el que, vía el Decreto de Urgencia 037-2008, se creó un cargo adicional incluido en el Peaje por Conexión al Sistema Principal de Transmisión. Dicho cargo en la práctica incrementó la tarifa eléctrica, afectando la economía de todos los consumidores.

Trabajo con viceministerio

En esta línea, en una reciente reunión de trabajo sostenida entre Jaime Luyo, viceministro de Electricidad del Ministerio de Energía y Minas (MINEM) y Brendan Oviedo, presidente de la SPR, y sus respectivos equipos, el representante del portafolio manifestó su convencimiento, no solo como autoridad, sino sobre todo como especialista en la materia, de cómo las energías renovables pueden impulsar una reforma energética que se traduzca en electricidad más barata para más personas.

En esta reunión la SPR, en coherencia a su agenda sectorial (position paper) indicó que es vital que el Gobierno tome las medidas necesarias para evitar una crisis energética y agilizar el proceso de descentralización energética que lleva muchos años postergado.

Entre algunas medidas, el gremio propone el desarrollo de proyectos de energía renovable que permitan, por un lado, descentralizar estratégicamente la matriz energética del Perú; y por el otro, evitar la dependencia exclusiva de fuentes de energía hidroeléctrica (vulnerable por el cambio climático con sequías, por ejemplo) y de gas (recurso que es agotable).

Cabe indicar que el 80% de las fuentes de generación se encuentran en la zona central del país, por lo cual las regiones del norte y sur son energéticamente vulnerables a potenciales fallas en las actuales fuentes de suministro.

En esta línea la SPR asegura que el nuevo pilar energético que requiere el Perú parte por el desarrollo de los proyectos de fuentes de energías renovables las cuales aportarán en la descentralización, diversificación energética y en el cumplimiento de nuestros compromisos internacionales de reducción de las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI).

A diferencia de otros países de la región, la ventaja del Perú es la existencia de recursos en distintos sectores: solar, eólico, geotermia, hidroeléctrica y biomasa, que pueden garantizar un suministro eléctrico sostenible y renovable en todo el territorio nacional, garantizando la independencia energética en las regiones del norte y sur.

La SPR, compuesta por 37 asociados que desarrollan proyectos de energías renovables, enfatiza en su agenda sectorial la decisión estratégica de dar impulso a normas adhoc que permitan destrabar inversiones proyectadas en más de US$ 11,000 millones, referidas a proyectos solares, eólicos, geotérmicos e hidroeléctricos.

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