(AFP) El gobierno peruano busca paralizar la producción de palma y cacao realizada por firmas vinculadas al empresario estadounidense en territorio que deforestaron ilegalmente en la Amazonía, reportó el Minagri.

Se trata de firmas que operan en las regiones Ucayali y Loreto, puestas al descubierto a inicios de año por una investigación del portal Convoca.pe apoyada por las ONG ambientalistas Oxfam y Kené, que las ligaron al empresario Melka, director ejecutivo de United Cacao, firma que lista en la Bolsa de Londres.

La organización EIA también lo responsabiliza por la deforestación en el Perú.

"El objetivo ahora es que el Estado logre parar (esas empresas). No se puede permitir que actividades de ese tipo se desarrollen en el país. Necesitamos seguir luchando hasta que lo paremos", dijo la directora del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor), Fabiola Muñoz.

Aseguró que el tema se ventila en el Poder Judicial. "Hay varios procesos vinculados al caso de Plantaciones Ucayali, y otros procesos vinculados al caso Tamshiyacu (Loreto). En ambos casos los procesos continúan", declaró respecto a la deforestación realizada por ambas empresas en la Amazonia de Perú.

"En un caso ya se ha definido que había un área (50%) que era suelo forestal, y en esa área la deforestación es absolutamente ilegal, allí no hay discusión. En el otro caso, ni siquiera tiene estudio aprobado. Todo lo que han hecho es absolutamente ilegal", agregó.

Según la investigación de Convoca.pe, Melka creó una veintena de firmas en el Perú con las que compró terrenos en la Amazonia peruana, para colocar cultivos de palma y cacao, sin permisos. De acuerdo con el informe, serían unas 13,000 hectáreas las arrasadas.

Para Muñoz, el daño económico causado al país por esta actividad, asciende al equivalente a unos US$ 112 millones.

"La Dirección de Asuntos Ambientales Agrarios puso medidas cautelares para paralizar la actividad, y cuando quisieron entrar (a las plantaciones) no pudieron hacerlo. Los amenazaron (a los funcionarios gubernamentales)", detalla. Explicó que se trata de un "caso emblemático" para el Estado.

El marco legal del Perú no permite el cambio de uso de suelo forestal para actividades agrícolas o agroindustriales. "La agricultura en el Perú, para poder crecer más, no necesita cambiar su bosque", agregó.

Si bien admitió que en el Perú existe una ley que promueve la siembra de palma para la generación de combustible, no quiere decir que se deforeste para ello. Detalló que ya existe un área deforestada de unas 58,000 hectáreas aptas para el sembrío de palma.

"Perú no tiene condiciones para el modelo que se ha instalado en Indonesia", dijo la funcionaria, respecto al mayor productor mundial de palma aceitera y uno con las mayores tasas de deforestación del planeta.