De acuerdo a varias sentencias recientes de la Corte Suprema, incluyendo las dictadas en casación laboral N° 13704-2017-Lima y N° 9916-2017-Lambayeque, cuando se despide a un trabajador de confianza este no tiene derecho a ser indemnizado en caso demande a la empresa por despido arbitrario.

Es decir que gerentes o aquellos en cargo de dirección no pueden recibir una compensación, ni siquiera por daños y perjuicios, aun si probasen que su despido fue arbitrario, derecho que tienen los demás trabajadores.

De acuerdo a la Corte Suprema, esto se debe a que el derecho a la indemnización solo surge como alternativa a la reposición laboral. Es decir, según la lógica de la Corte, la opción para acceder a la indemnización solo existiría en caso el trabajador pudiese ser repuesto a su puesto de trabajo.

Como se conoce, los trabajadores de confianza no pueden volver a reingresar a la empresa, aun si ganan un proceso contra su antiguo empleador, como pueden hacerlo cualquier otro trabajador. Esto se debe a que, una vez pérdida la confianza que los empleadores invistieron en el trabador, no cabría la opción que el trabajador vuelva a trabajar, ya que nunca volverá a tener la confianza de su empleador.

Sin embargo, si se trata de una persona que ascendió a una posición de confianza (mixtos), tiene derecho a la reposición a su puesto original, siempre y cuando la empresa está de acuerdo, o de lo contrario al cobro de una indemnización por despido.

Por otro lado, la Corte Suprema señala que para despedir a un trabajador de confianza “basta la sola decisión del empleador para retirarle la confianza y dar por finalizada la relación laboral”, por lo que se relativiza la estabilidad laboral de estos trabajadores, quienes pueden ser despedidos por la decisión unilateral del empleador.

Entonces, los trabajadores de confianza no tienen ni derecho a la estabilidad laboral ni a la indemnización en caso de despido, de acuerdo a la Corte Suprema.

Germán Lora, socio del estudio Damma, señala que han habido casos en los que las empresas que han perdido demandas por despido arbitrario contra trabajadores de confianza mixtos, fueron dados la opción de optar por pagarles una indemnización en lugar de ofrecerles regresar a trabajar, por lo que la posición del trabajador de confianza se precariza aun más.