Pedro Castillo fue proclamado presidente del Perú para el periodo 2021-2026. (Agencias)
Pedro Castillo fue proclamado presidente del Perú para el periodo 2021-2026. (Agencias)

La agencia de calificación crediticia  señaló que la victoria de Pedro Castillo en las elecciones presidenciales aumenta la incertidumbre sobre la política económica, ya que el presidente electo aún tiene que definir las prioridades políticas clave de su amplio partido político de campaña (Perú Libre), de tendencia izquierdista.

Indica que la incertidumbre política se ve agravada por los problemas de gobernabilidad, mientras que el impacto de la pandemia hará que la deuda aumente a corto plazo. Agrega que la polarización entre los votantes, reflejada en el estrecho margen de la victoria, y las divisiones sociales relacionadas con la pandemia agravan los riesgos de gobernabilidad derivados de un Congreso muy fragmentado.

Señala que el nuevo gobierno puede necesitar alianzas con los partidos más pequeños y una fuerte disciplina interna para aprobar la legislación, y es que según recuerda, la previsibilidad de la política económica y fiscal se vio afectada por el Congreso saliente de 2020-2021, que promulgó varias medidas populistas.

“Por lo tanto, el enfoque de la administración de Castillo en la gestión de sectores estratégicos como la minería, el gas y las comunicaciones, su actitud hacia los contratos privados y la configuración de su política fiscal, serán importantes para evaluar la solvencia soberana”, sostiene la agencia de calificación.

Los cambios propuestos

A modo de resumen, señala que el partido político Perú Libre aboga por reformar la Constitución (incluido el capítulo económico clave que consagra los principios del libre mercado y protege el marco de la política macroeconómica), ampliar el papel del Estado en los negocios, cambiar o anular las concesiones y los contratos a las empresas privadas, aumentar significativamente la fiscalidad de los sectores estratégicos (incluida la minería y el gas natural) o nacionalizarlos, reestructurar el sistema nacional de pensiones y abolir la contratación laboral flexible.

“Desde las elecciones, Castillo ha repetido su promesa de solicitar una asamblea nacional para rehacer la constitución, ha centrado el debate en torno al sector minero en la fiscalidad y ha defendido el apoyo al sector agrícola. No ha presentado un documento político de centro, a diferencia del ex presidente Humala, que ganó con una plataforma de izquierda en 2011″, refirió.

Pese a ello, señala que se ha enviado señales preliminares de continuidad política en el Banco Central de Reserva de Perú, descartando los controles de precios o de divisas.

“El nombramiento de los principales ministros y reguladores, así como del gobernador y el consejo del banco central, y las propuestas concretas de la nueva administración también ayudarán a aclarar las prioridades políticas de Castillo”, dijo.

Cabe mencionar que Fitch Ratings colocó la calificación de Perú ‘BBB+’ en Perspectiva Negativa en diciembre de 2020, reflejando el debilitamiento de las instituciones políticas, un balance gubernamental más débil y desafíos para la estabilización de la deuda pública.