(Bloomberg).- El presidente de la de Dallas, Robert Kaplan, dijo que Estados Unidos se ha beneficiado de la inmigración y que la apertura histórica del país a los recién llegados es una ventaja competitiva vital que necesita para mantener su liderazgo en la carrera económica contra China.

"Culturalmente, somos históricamente receptivos a los inmigrantes, esa es una de las cosas que nos diferencia de Japón y China", dijo Kaplan el viernes durante declaraciones en Dallas. "Asegurémonos de ser muy cuidadosos de socavar las cosas que nos hicieron grandes".

Sus comentarios son un marcado contraste del tono empleado por el gobierno del presidente Donald Trump, que se ha centrado en limitar la inmigración como una forma de proteger los empleos estadounidenses como parte de una campaña más amplia de nacionalismo económico encabezada por el asesor presidencial y ex colega de Kaplan Steve Bannon.

El principal estratega de la Casa Blanca, a quien Kaplan ayudó a reclutar para Goldman Sachs Group Inc. a principios de los años 80, dijo a la revista American Prospect que "la guerra económica con China es todo. Y tenemos que estar de forma maníaca enfocados en eso", durante los próximos cinco a 10 años para evitar que EE.UU. tenga que replantearse.

El jefe de la Fed de Dallas, ex alto ejecutivo de Goldman Sachs y profesor de la Escuela de Negocios de Harvard, con frecuencia dice que EE.UU. necesita aumentar su fuerza laboral para mejorar el crecimiento económico, incluso a través de la inmigración.

China tiene "un peor problema de envejecimiento que nosotros. ¿Por qué es importante? Significa que tienen un problema de crecimiento de la fuerza de trabajo y que están tratando de arreglarlo, pero que va a tomar 20 a 25 años", dijo Kaplan. Por su parte, EE.UU. ha podido respaldarse en la inmigración.