En medio de la reactivación del sector aerocomercial, Viva Air llega a sus cuatro años de operación en Perú. Y si bien el primer trimestre fue afectado por las restricciones de febrero, la actividad en las últimas semanas avizora vientos a favor y trabaja en nuevas estrategias.
Stephen Rapp, CEO de Viva Air Perú, señaló que una de ellas apunta a los vuelos internacionales, por lo que la aerolínea “low cost” está incorporando más frecuencias a Medellín para fortalecer su hub en esta ciudad colombiana, desde donde partirán vuelos a EE.UU. y México a partir de junio.
Sin embargo, también prevén tener algunas rutas directas desde la capital peruana. Y es que, tras la salida de Avianca, Viva Air Perú ganó permisos para cuatro frecuencias semanales a Buenos Aires. “Lo vemos hacia finales del 2021”, adelantó Rapp. Respecto a la posibilidad de volar a otras ciudades del exterior como Santiago de Chile, desde Lima, el ejecutivo refirió que han operado ya vuelos humanitarios hacia la capital chilena y Río de Janeiro, lo cual los anima a tomar nuevas oportunidades.
“Vienen 25 aeronaves nuevas y seguro veremos algunos vuelos más”, anotó, tras precisar que estas últimas opciones aún no están en el radar de los meses próximos.
Cabe precisar que ya han recibido 21 de las 50 aeronaves anunciadas en total.
Recuperar mercado
En lo que se refiere a rutas nacionales, la aerolínea vuela a siete destinos y opera al 40% de la capacidad que tenía antes de la pandemia. Para fines de año, confía en retomar los vuelos a Cajamarca, Jaén y Tacna, completando así la oferta que tenía hasta inicios del 2020. En tanto, para el 2022, proyecta recuperar el tamaño alcanzado por la operación peruana antes de la crisis sanitaria.
“Por nuestro modelo low cost, las eficiencias y la flexibilidad, estaríamos algo mejor que el sector. Los peruanos que quieren viajar piensan cómo van a invertir su dinero y optan por las tarifas bajas”, comentó a Gestión, tras reconocer que la ocupación debe llegar al 92% que tienen como meta.