UBS Group AG está rompiendo lazos con algunos clientes venezolanos a los que presta servicios desde Estados Unidos a medida que el Gobierno de Trump endurece las sanciones contra un país sumido en una lucha de poder.
La decisión afecta a una serie de cuentas con vínculos con el Gobierno de Venezuela o con la compañía estatal Petróleos de Venezuela SA, según personas con conocimiento de la decisión. Esto se produce después de que el banco realizara una revisión en profundidad y decidiera que algunas relaciones no justificaban los riesgos de cumplimiento, dijeron las personas, que pidieron no ser identificadas debido a que se trata de información interna.
Al menos 17 asesores en EE.UU. con clientes venezolanos han abandonado UBS en los últimos nueve meses, de acuerdo con las personas y documentos disponibles públicamente. A quienes se quedan se les pide que intensifiquen su diligencia debida sobre los clientes venezolanos y sus fondos, dijeron las personas.
UBS declinó hacer comentarios.
Los bancos están aumentando sus esfuerzos de cumplimiento después de pagar miles de millones de dólares en los últimos años por violar sanciones de EE.UU. o incumplir leyes contra el lavado de dinero. Venezuela se ha convertido en una preocupación especial después de que la administración Trump intensificara en abril las medidas contra la industria petrolera del país en un esfuerzo por alentar el cambio de régimen. El mes pasado, Suiza siguió a otros países europeos en la imposición de sanciones a 11 funcionarios venezolanos.
UBS administra desde EE.UU. un estimado de entre US$ 2,000 millones y US$ 3,000 millones en activos de venezolanos ricos, dijo una de las personas, una cantidad relativamente menor en comparación con el resto de sus negocios latinoamericanos. Un pequeño número de clientes del país latinoamericano tiene su dinero en Suiza, dijo una de las personas. Esas cuentas no se cerrarán.
UBS no da a conocer públicamente la cantidad de riqueza que administra para sus clientes latinoamericanos, pero en una presentación del 2018 a los inversionistas, cifró el monto en 108,000 millones de francos (US$$ 118,000 millones).