La movilidad eléctrica avanza a paso lento en Lima. Si bien los temas normativos, que pueden ser una barrera, aún están en proceso -en marzo se instaló un Comité Técnico que se encargará de elaborar las normas eléctricas peruanas para vehículos eléctricos-, el lado de la oferta también se va adaptando a nivel de precios y disponibilidad.
En Perú el número de vehículos eléctricos que circulan es reducido (ABB estima que apenas hay menos de 50 autos 100% eléctricos) y, en el caso de los de alta gama, lo es aún más. ¿Qué condiciones se requieren para impulsar su ingreso al mercado local?
Infraestructura
Álvaro Chirinos, gerente general de Maserati en Perú, estima que la marca del tridente lanzará una generación híbrida de todos sus productos a partir del 2021. Hacia el 2025, ya arrancaría con una oferta de vehículos 100% eléctricos.
“Más que regulación, lo que se necesita es infraestructura”, comenta Chirinos. El representante de la automotriz italiana indica que, a medida en que lleguen más unidades de vehículos híbridos y luego eléctricos el acceso a estos accesorios, que se conectan a la pared, se hará más asequible.
Considera que esta reducción de precios será acelerada. “Hace cuatro años un buen cargador de vehículos eléctricos costaba entre US$ 6,000 y US$ 7,000. Hoy se puede encontrar a US$ 400”.
Costos
Chirinos considera que el precio de un vehículo eléctrico eventualmente se equiparará al de un gasolinero. Esto incluso en el caso de los de alta gama.
“En la medida en que la producción se masifique y entren más vehículos eléctricos al mercado, el precio tenderá a ser el mismo. Estimo que de acá a tres años, y en adelante, podrían equipararse”, considera Chirinos.
De otro lado, afirma que el mantenimiento en un vehículo eléctrico es más sencillo que el de uno con motor a combustión. Esto debido a la simplicidad del vehículo: mientras que en un eléctrico entran solamente 2,000 piezas, en uno de combustión gasolinera hay casi 14,000 piezas. No hay mucho mantenimiento que hacer y menos lubricantes que usar.
Electrolineras
Las electrolineras son cargadores de alta potencia que permiten abastecer las baterías de los autos eléctricos en un espacio de entre 15 a 20 minutos. Los equipos, dependiendo del tipo de vehículos al que se dirigen, pueden oscilar entre los US$35,000 (automóviles) y los US$ 150,000 (buses y camiones).
En pocas palabras, son los equipos que usan las estaciones de servicio dirigidas al mercado de vehículos.
Edwin Zorrilla, especialista en movilidad eléctrica de ABB, comentó hace algunos meses, que se requiere una modificación en la ley de concesiones eléctricas para permitir que otros actores, como las electrolineas, puedan comercializar energía. Hasta el momento solo las empresas distribuidoras tienen esta licencia.
"Esto lo puede hacer el Ministerio de Energía y Minas (Minam) a través de un decreto supremo, de manera acotada para la recarga de baterías de vehículos eléctricos", indica.
De esta manera se abriría el mercado de abastecimiento de energía para vehículos. Si bien las estaciones de servicio, bajo esta nueva regulación, podrían ofrecer el servicio de carga eléctrica a través de electrolineras, no serían los únicos.
“Aparecerán nuevos actores. Los centros comerciales, los edificios corporativos, los estacionamientos, etc.”, comenta Zorrilla.