El sindicato más poderoso de Alemania, IG Metall, y los empleadores llegaron a un acuerdo en el estado clave de Baden-Württemberg que otorgará a los trabajadores un aumento salarial de 4.3%, y así se evitarán más interrupciones en varios gigantes industriales, desde Robert Bosch GmbH hasta Daimler.
El acuerdo, que abarca 27 meses y fue cerrado tras semanas de intensas negociaciones y perjudiciales huelgas de 24 horas, se caracteriza por las demandas de los trabajadores de un mejor equilibrio entre vida privada y trabajo. La unidad regional de IG Metall rechazó una oferta de aumento de 6.8% y llegó a un acuerdo que contempla pagos adicionales por única vez y opciones de reducir temporalmente el horario de trabajo.
“No es un acuerdo extremadamente bueno para los sindicatos, pero tampoco es muy malo. En líneas generales, lograron que les aceptaran más demandas de lo que se esperaba”, dijo Andreas Scheuerle, economista de Dekabank en Fráncfort. “Agregando los pagos por única vez y contemplando solo el crecimiento de los salarios en un año, da un 3.8%”.
Las autoridades monetarias del Banco Central Europeo y los economistas vienen siguiendo con atención las negociaciones de contratos colectivos de trabajo ante la preocupación por el impacto a largo plazo del estancamiento salarial.
Si Alemania, el país más próspero y la economía más grande de la eurozona, no puede elevar mucho sus salarios, se complican las iniciativas para estimular la inflación y levantar las medidas de estímulo.
‘Tolerable’
Para los empleadores, el desafío era satisfacer la demanda de más tiempo libre pese a que ya sufren una escasez de trabajadores calificados en algunas áreas. IG Metall, que representa a 3.9 millones de trabajadores en los sectores de metales e ingeniería eléctrica, comenzó pidiendo un aumento salarial de 6% en 12 meses y subsidios para los empleados que reducen su horario de trabajo para cuidar de familiares.
El acuerdo —alcanzado tras siete días de huelgas de 24 horas que paralizaron la producción en todo el país— se puede definir como “tolerable” pero también incluye “elementos dolorosos”, dijo Stefan Wolf, jefe de negociadores del grupo de empleadores Südwestmetall, en la rueda de prensa conjunta en Stuttgart. Rainer Dulger, presidente de la organización de empleadores Gesamtmetall, dijo que se propondrá adaptar el acuerdo de Baden-Württemberg a otras regiones de Alemania.
“En el contexto europeo general, el hecho de que este aumento salarial se acordó por 27 meses subraya que no será el comienzo de una espiral ascendente de salarios y precios en Alemania”, dijo Carsten Brzeski, economista jefe de ING-Diba en Fráncfort. “De hecho, distribuir un aumento nominal de 4.3% a lo largo de dos años reduciría la presión para que suban los salarios, en vez de aumentarla, en comparación con los últimos años”.