El Gobierno dio este fin de semana luz verde para el funcionamiento de las apps de reparto, y las principales empresas ya alistan sus procedimientos. Rappi comunicó que esta semana reactivaría sus operaciones de manera progresiva.
La empresa, para evitar la aglomeración de repartidores, realizará una proyección diaria de las horas de mayor o menor afluencia de demanda, a fin de limitar la conexión de ‘rappitenderos’ a la aplicación.
Rappi agregó que cuentan con una póliza de seguros para sus rapartidores; también con un seguro privado contra el COVID-19, que cubrirá los costos de servicios médicos que genere contraer el virus; y con un fondo económico para que sean diagnosticados con el nuevo coronavirus, el cual brindará un monto de dinero como soporte durante la etapa de recuperación.
La compañía implementará centros de control para que los repartidores, de manera obligatoria, asistan todos los días a pasar por una medición de temperatura, desinfección y por una verificación de uso del kit de protección.
Planes de Rappi
En conversación con Gestión, su country manager, José Ignacio Bernal, detalló que la empresa iniciará de manera progresiva, pero prevé un rápido incremento de la operación.
“Proyectamos duplicar nuestros usuarios actuales para fines de año, vamos a superar la que meta que nos habíamos propuesto a inicios de año”, precisó Bernal. Asimismo, comentó que también esperan que se incremente el número de repartidores, que hasta antes de la cuarentena oscilaba entre 8,000 y 10,000 usuarios conectados al mes.
La empresa también proyecta observar un crecimiento exponencial en su categoría de supermercados, que, según explicó el ejecutivo aún está en una etapa inicial en el mercado peruano. “Para responder a este incremento vamos a incluir una flota de autos que puedan manejar mayor carga, estamos iniciando con mil autos”, sostuvo Bernal. Respecto a las categorías, Rappi activará progresivamente todas las categorías de la app y reforzará las de tecnología y moda, que estuvieron entre las últimas en incluirse.
Para el rubro de gastronomía, la apuesta de la empresa serán los restaurantes de lujo que recientemente han incorporado. “Los restaurantes de lujo antes no apostaban por el delivery y tenían, en parte, una fuerte clientela extranjera. Nos hemos asociado con varios para su reactivación, pero tendrán una experiencia distinta, tanto en la comida como en los empaques y la presentación”, señaló el ejecutivo. Entre las nuevas marcas que han incorporado a su cartera destacan Astrid & Gastón, La Mar, Mayta y Chifa Titi.
Dark Kitchens
Rappi opera a la fecha tres cocinas ocultas (dos en Lima y una en Punta Hermosa) donde sus asociados pueden alquilar una cocina para atender el canal de delivery en zonas donde no tienen acceso. “Con la autorización del Gobierno, vamos a reabrir nuestras cocinas ocultas de Lima”, señaló José Ignacio Bernal. En Latinoamérica ya cuentan con 450 de estos locales y en el Perú planean duplicar el número actual con el cuentan para el cierre del 2020.