está considerando la venta de su negocio de vinos, que incluye las etiquetas de Jacob’s Creek de Australia y Campo Viejo de España, según personas familiarizadas con el tema.

La segunda mayor destiladora del mundo ha mantenido negociaciones iniciales sobre una posible venta del negocio, que genera unas ventas de alrededor de US$ 500 millones, dijeron las personas.

Las deliberaciones se encuentran en una etapa preliminar y Pernod podría decidir quedarse con el negocio, dijeron las personas, que pidieron que no se revelara su identidad porque se trata de información privada.

"La compañía tiene como política no hacer comentarios sobre rumores o especulaciones", dijo Pernod Ricard en un correo electrónico.

El fabricante del vodka Absolut había comenzado a estudiar opciones para la división antes de convertirse en un objetivo de Elliott Management Corp. de Paul Singer, dijo una de las personas.

El inversor activista reveló su participación en diciembre y solicitó recortes de costes por valor de 500 millones de euros (US$ 565 millones) en Pernod Ricard, que va por detrás de Diageo plc en el negocio de las bebidas alcohólicas.

"El grupo no está bajo ninguna presión externa y ya ha mencionado varias veces que pretende continuar con la gestión dinámica de su cartera", dijo Pernod Ricard.

Menos rentable

El negocio de vinos de la compañía con sede en París es menos rentable que su lista de marcas de licores. Si bien Pernod Ricard ha adquirido viñedos como Kenwood en California y Helan Mountain en la región china de Ningxia en los últimos años, el máximo responsable, Alexandre Ricard, ha favorecido la expansión de licores artesanales de más rápido crecimiento con la compra de marcas como la ginebra Monkey 47 y el mezcal Del Maguey.

"Para mí, esto tiene mucho sentido estratégico ya que es una parte relativamente pequeña del grupo, con menor crecimiento y menor rentabilidad", dijo el analista de Sanford C. Bernstein, Trevor Stirling.

La compañía también ha vendido otros productos que no considera centrales para su estrategia, como la línea de brandies Domecq y Paddy Irish Whiskey.

La industria del vino está más fragmentada que los sectores de la cerveza y licores, donde las empresas del sector han impulsado la consolidación en los últimos decenios para mejorar los costes de distribución y suministro.

En el 2016, Diageo vendió su negocio de vinos a Treasury Wine Estates Ltd., el productor australiano de Penfolds, por US$ 600 millones.