Foto 6 | Trabajadores de Doe Run quieren comprar refinería de La Oroya. Esta nueva propuesta de adjudicación es por el 60% del valor del complejo metalúrgico, monto que los acreedores laborales lo sustentarán con la deuda concursal que la empresa les tiene pendiente. (Foto: Andina)
Foto 6 | Trabajadores de Doe Run quieren comprar refinería de La Oroya. Esta nueva propuesta de adjudicación es por el 60% del valor del complejo metalúrgico, monto que los acreedores laborales lo sustentarán con la deuda concursal que la empresa les tiene pendiente. (Foto: Andina)

Los trabajadores de la planta metalúrgica La Oroya de Perú y un consorcio de empresas liderado por Samsel Group buscan comprar en sociedad el complejo minero y una pequeña mina de cobre por unos US$ 139 millones, informó Luis Castillo, líder del sindicato de trabajadores de La Oroya.

Indicó que en conjunto con la firma global Samsel Group presentaron la oferta de compra ante las autoridades peruanas, que quieren reactivar la planta ahora paralizada por deudas y no completar un plan de modernización.

"Hemos presentado una (propuesta de) compra firme de carácter irrevocable, que será pagado con cheque de gerencia los US$ 139 millones ", señaló.

Si se concreta la compra en un plazo que vence el 15 de agosto, el consorcio de Samsel Group se compromete a invertir en un periodo de tres años unos US$ 800 millones para mejorar la planta y la mina de cobre de La Oroya, agregó.

La fundición de cobre, zinc y plomo La Oroya, de casi un siglo de antigüedad, fue cerrada en el 2009 cuando Doe Run Perú se quedó sin dinero para operar y completar su modernización.

Reactivar el complejo es uno de los retos del Gobierno, debido a que su operación convirtió por años a la ciudad de La Oroya en una de las más contaminadas del mundo, pero es el único sustento económico de la zona, según estudios oficiales.

Castillo refirió que la junta de acreedores de La Oroya prorrogó la fecha de adjudicación del complejo hasta el 15 de agosto, plazo en que el consorcio y los trabajadores deberán concretar el pago por los dos activos de la empresa: la planta y la pequeña mina Cobriza ubicadas en los Andes de Perú.

"Ellos como grupo de empresas se han comprometido a poner para la compra de la planta y la mina unos US$ 112 millones y nosotros, los acreedores laborales, vamos a poner casi US$ 28 millones", manifestó.

El dirigente indicó que si se concreta la compra en agosto, el consorcio buscará que las áreas de fundición de zinc y plomo del complejo La Oroya puedan volver a operar en septiembre o en octubre. "El circuito de cobre aún no puede operar", dijo.