Bloomberg.- El nuevo jefe de General Electric Co. apenas ha pronunciado palabra en público durante sus primeros dos meses en el puesto. Pero el presidente ejecutivo, John Flannery, ya está dejando entrever su intención de forjar una de las reformas más radicales en la historia de la compañía de 125 años.

El lunes, aceptó el nombramiento por parte del directorio de Ed Garden, socio fundador del accionista activista Trian Fund Management, que ha estado presionando a GE para que realice una revisión. Tres días antes, la empresa nombró un nuevo director financiero y anunció la salida de otros dos ejecutivos de alto perfil. Flannery también está buscando profundas reducciones de costos y analizando cambios en la cartera conforme busca revertir la mayor caída de este año en el Promedio Industrial Dow Jones.

Flannery, quien la semana pasada también asumió el cargo de presidente de directorio, podría estar preparado para recortar las expectativas de ganancias cuando presente planes para revitalizar al asediado fabricante en una reunión programada para el 13 de noviembre. Incluso un recorte de dividendos es una posibilidad, según Vertical Research Partners, a medida que GE afronta débiles flujos de efectivo y lenta demanda en los mercados de generación de energía y petróleo.

"Si las ganancias y el flujo de efectivo bajan incluso más de lo que pensábamos, el dividendo obviamente debería ser reducido", dijo el analista Jeff Sprague de Vertical Research en una nota del 6 de octubre. "GE podría terminar en un mejor lugar una vez que se calmen las aguas, pero los inversionistas deben evitarla hasta que sepamos más. Ese mejor lugar podría ser con un punto de partida mucho menor para el precio de las acciones".

Garden, que trabaja en estrecha colaboración con Nelson Peltz, de Trian, reemplazará a Robert Lane en el directorio, dijo GE en una declaración el lunes. El fabricante de motores de aviones, turbinas de gas y máquinas de ultrasonido, con sede en Boston, mantiene un "diálogo activo y constructivo" con Trian, según el comunicado.

"Como otros accionistas de GE, estoy decepcionado por el reciente desempeño de las acciones de GE", dijo Garden en el comunicado. "Pero sigo creyendo que GE representa una atractiva oportunidad de inversión a largo plazo con una significativa tendencia al alza".

Las acciones cayeron 2.6% a US$23,76 a las 11 de la mañana en Nueva York. GE había caído 23% este año hasta el viernes, encaminándose a su peor desempeño durante un año calendario desde 2008.

Flannery ha estado reuniéndose con los inversionistas y ha dicho que considerará todas las opciones para transformar la compañía. Ha cortado servicios como aviones y autos corporativos como parte de un plan existente para eliminar US$2.000 millones de costos hasta 2018. Los analistas creen que podría reducir gastos por una cantidad aún mayor.

El rostro de GE cambió dramáticamente la semana pasada, cuando varios de los ejecutivos más conocidos de la compañía, incluyendo el director financiero Jeff Bornstein, renunció. La renuncia de Bornstein llegó después de que fue pasado por alto para reemplazar a Jeff Immelt, quien se retiró como presidente del directorio antes de lo previsto.

Los analistas esperan una ganancia este año de US$1,54 por acción, de acuerdo con el promedio de las estimaciones compiladas por Bloomberg, menos que el pronóstico de GE de al menos US$1.60.

Un recorte de dividendos podría ser necesario ya que el pago actual "consume todo o la mayor parte" del flujo de caja industrial libre de GE en el futuro previsible, dijo Sprague. GE ha dicho que mantener el pago es una prioridad y se ha negado a comentar sobre la posibilidad de un recorte de dividendos.

La compañía redujo su dividendo en 2009 durante la crisis financiera, la primera medida de este tipo para GE desde la Gran Depresión. La compañía paga un dividendo anual de US$ 0.96, con un rendimiento de 3.9%.