El COVID-19 paralizó las ventas de los centros comerciales y, con ello, el negocio de las tiendas por departamento y también las de tipo stand alone. Así, las marcas de moda y calzado, al inicio de la cuarentena, hicieron proyecciones pesimistas en medio del confinamiento.
Según comenta Christian Cuba, Business Development Director de Analyticalways, se proyectaban decrecimientos de hasta 40% para el cierre del 2020.
Sin embargo, según ha podido registrar la compañía, que ofrece una plataforma para la gestión del retail y tiene entre sus clientes a grandes tiendas departamentales y también a cadenas de menor tamaño dedicadas al comercio de ropa y calzado, los resultados de las tiendas han mejorado progresivamente.
Cuba revela que, tras la reapertura de los malls, en julio, la venta de las tiendas de moda y calzado registraron una caída del 50%. Luego, en agosto, el decrecimiento fue de 38%. El ejecutivo espera que, a la par de la mejora progresiva de las ventas, la campaña navideña permita un mejor escenario para el cierre del año.
“Se espera que la temporada de Navidad levante mucho las ventas. En el escenario optimista, podrían “crecer” 0% e igualar al año pasado. En un caso más realista, la caída podría alcanzar hasta el 10%”, indica Cuba.
De otro lado, en un contexto con tiendas al 50% de aforo, destaca que durante los próximos meses será crucial una buena gestión de inventarios cubrir la demanda del consumidor. “Es necesario tener el producto adecuado en el canal adecuado”, indica Cuba.
Transformación digital
La pandemia, comenta Alberto Egido, International Marketing Director de Analyticalways, aceleró la transformación digital del retail en Perú.
“Se estima que en lo que va de año se ha avanzado en digitalización tanto como en los cinco últimos años”, afirma.
Según Egido, son tres áreas las que destacan en la consolidación de los nuevos modelos de gestión de negocio para el sector.
Omnicanalidad: “Las empresas están reforzando sus canales de venta digital para poder llegar a los clientes en los hogares, avanzar hacia la unión de la parte online con la tienda física y lograr experiencias de compra unificadas”, afirma. Así, la expansión del e-commerce hace que el cliente pase de ser multicanal a ser omnicanal y exige que las empresas adopten la tecnología adecuada en este proceso de venta.
Inteligencia artificia (lA) para la gestión de datos: “El factor diferencial y propio de la IA es que el sistema es capaz de retroalimentarse y aprender por sí sola. Es así como los sistemas basados en IA pueden aprender a ofrecer a un cliente potencial los productos que realmente quiere en el momento en el que los necesita, ajustando la necesidad la cantidad de producto necesario, eliminando sobrantes y haciendo a las empresa más eficientes y sostenibles”, sostiene Egido.
Evolución del punto de venta: Las soluciones tecnológicas para digitalizar el punto de venta volverán a formar parte de la estrategia de negocio, ya que los comercios físicos deberán evolucionar mucho más rápido hacia espacios de experiencia donde cautivar al cliente.
“Al transformar digitalmente los espacios (desde el punto de venta físico y el online) el minorista recibe datos que aportan conocimiento exhaustivo del comportamiento de los clientes y puede adaptar más rápidamente sus estrategias”, precisa.