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Un objetivo para limitar el calentamiento global a 1,5 °C no es lo suficientemente difícil, según el director general de Cemex SAB de CV, uno de los mayores productores de cemento de América.
A pesar de estar en un sector que es difícil de descarbonizar y de que las proyecciones muestran que el planeta se calentará en más de 2 °C para fines de siglo, Fernando González dijo que cree que tecnologías emergentes como la captura de carbono podrían limitar los aumentos de temperatura a menos de 1.5 °C.
”Uno o negativo, ¿quién sabe?”, dijo el viernes en una entrevista en el marco de las conversaciones climáticas de la cumbre COP27 en Sharm el-Sheij, Egipto. La tecnología disponible dentro de cinco años podría ser transformadora para esos esfuerzos, agregó.
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Los comentarios se produjeron en medio de la primera visita a la COP de González, quien ha estado a la cabeza de la multinacional mexicana desde 2014. El “empuje sobre la acción climática” ha cambiado “drásticamente”, señaló.
El carbono incorporado ha sido “infraatendido” en las estrategias para reducir las emisiones de los edificios, según un informe del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente. Los materiales utilizados en construcción, incluidos el hormigón, el acero, el aluminio, el vidrio y los ladrillos, están vinculados al 9% de las emisiones mundiales de CO2 relacionadas con la energía.
Cemex se ha fijado el objetivo de reducir las emisiones netas de CO2 por tonelada de producto de cemento en más de un 40% para 2030 frente a los niveles de 1990, y aún debe superar grandes obstáculos técnicos para alcanzarlo. El año pasado, la compañía alcanzó un 26,2% en reducciones de CO2. También se ha comprometido a producir cemento con cero emisiones netas para 2050.
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González mencionó alianzas que están avanzando en sus iniciativas relacionadas con el clima. Este año, Cemex y la startup Synhelion anunciaron que utilizaron energía solar para producir clínker, un componente clave del cemento. Cemex también está trabajando con otra startup, Carbon8 Systems, para encontrar formas de capturar CO2 durante el proceso de producción de cemento para reutilizarlo en otros productos de construcción.
”Nuestros productos son esenciales y seguimos siendo esenciales para la sociedad”, dijo. “El desafío es convertir el carbono malo en uno bueno”.