Redacción Gestión

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Santiago (Reuters).- , el mayor grupo de transporte aéreo de América Latina, está expectante sobre las oportunidades que puede ofrecer el cambio de gobierno en Argentina, pero teme que los problemas económicos de la región lleven a alzas de impuestos en los próximos años, dijo el jefe de la firma.

LATAM, con base en Santiago, acusó en reiteradas ocasiones al ex gobierno del vecino país de obstaculizar sus operaciones en favor de la estatal Aerolíneas Argentinas, un tono que cambió luego de la llegada al poder del ex empresario Mauricio Macri.

"Hoy en día lo que se está buscando es competencia y ser más eficientes. Les va a costar (…) pero se nota un cambio y nosotros como LAN Argentina vamos a apoyar ese proceso y tomar las oportunidades que podamos", dijo Enrique Cueto, presidente ejecutivo de LATAM, en un evento de la industria en Santiago.

"Ya hemos visto nosotros que estás barreras que teníamos se dejaron de tocar", agregó.

El ejecutivo aseguró que LAN Argentina, filial en el país de LATAM, y otras operadoras ya habían recibido autorizaciones para aumentar sus derechos de tráfico al país.

En esa línea, el controlador del grupo Avianca, Germán Efromovich, dijo a Reuters que percibía un mejor panorama para la aviación aerocomercial en Argentina y eso explicaba la reciente compra de la pequeña aerolínea de vuelos privados Macair Jet.

En contrapartida a las mejores expectativas en Argentina, el presidente ejecutivo de LATAM afirmó que un exceso de regulación está afectando a la industria aeronáutica en la región y que teme un aumento de los tributos en momentos en que los gobiernos enfrentan complejos panoramas fiscales.

"Creo que los próximos tres o cuatro años, en que la mayoría de los gobiernos de la región van a estar con problemas de presupuesto, lo único que vamos a recibir va a ser un embate para subirnos más impuestos, más tasas de lo que sea, y eso es lo que vamos a ver en los próximos dos a tres años", dijo Cueto.

Los eventuales mayores gravámenes no llegarían en el mejor momento para la industria aerocomercial, que muestra fuertes pérdidas por los efectos de las volatilidades cambiarias, una reducción en la capacidad y un complejo escenario económico y político en la región.

La compañía, que incluye las operaciones de la chilena LAN y la brasileña TAM, reportó recientemente pérdidas anuales por US$ 219.2 millones en el 2015, casi el doble de lo registrado el año previo.

Con casa matriz en Santiago, el grupo tiene unidades de operación en Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Paraguay y Perú.