Mina Escondida, en Chile. (Foto: Reuters)
Mina Escondida, en Chile. (Foto: Reuters)

La , el mayor yacimiento de cobre del mundo ubicado en el norte de Chile, no irá a huelga tras el acuerdo firmado este viernes entre los trabajadores de su principal sindicato y la compañía controlada por la gigante

El convenio, que se alcanzó en medio de una mediación reglada con el gobierno, alejó uno de los principales temores de la industria cuprífera mundial: una nueva paralización en el yacimiento del que se extrae el 5% del cobre del mundo y principal aportador al fisco chileno.

La Escondida, ubicada en la región de Antofagasta -a unos 1,300 km al norte de Santiago-, estuvo paralizada el año pasado por 44 días, en la mayor huelga en la historia de la minería chilena.

En un comunicado, la empresa informó que el poderoso Sindicato Nº1 -que agrupa a unos 2,500 trabajadores- había aprobado el acuerdo alcanzado en el proceso de mediación. "Con esta ratificación, se procedió durante la tarde de hoy (viernes) a la firma de un nuevo contrato colectivo", dijo la compañía.

Los términos del acuerdo no fueron informados por la compañía ni por el sindicato, pero medios de prensa locales afirman que se zanjó con un bono de término de conflicto de casi US$ 28,000 por trabajador, más un aumento salarial del orden del 2.8%.

Los trabajadores pedían inicialmente un bono de unos US$ 34,000 y un aumento salarial de 5%, en una de las actividades con mejores salarios de , el principal productor mundial de cobre.

El Sindicato informó que el acuerdo fue aprobado por el 93% de sus socios.

"Hemos logrado defender todos nuestros beneficios y logramos avanzar en los temas relevantes largamente postergados", como el mantenimiento de los beneficios en salud, dijo el vocero sindical Carlos Allendes.

De acuerdo a dirigentes, el contrato firmado este viernes tiene un plazo de tres años y beneficiará solo a los trabajadores afiliados al sindicato.

"Esto es producto de la unidad sindical y disciplina de todos nuestros socios", resaltó Allendes.

Por su parte, Patricio Vilaplana, vicepresidente de asuntos corporativos de Minera Escondida, dijo que se trata de "un acuerdo que satisface tanto a los trabajadores y a sus familias como la necesidad de Escondida de ser sustentable en el tiempo".

La mina, ubicada en pleno desierto de Atacama, a 3,100 metros de altura, produce en torno a un millón de toneladas métricas de cobre al año.

Efectos negativos
La paralización del 2017 generó US$ 740 millones de pérdidas a la compañía y significó una contracción de cerca de 1.3% del PBI chileno.

La producción de cobre de Escondida se redujo un 16% producto de la paralización, aunque las ganancias de la compañía fueron de US$ 1,192 millones, un 20% más que en el 2016.

"El país gana con estos acuerdos, porque aquí se han beneficiado los trabajadores. También tiene una seguridad la empresa y el país también tiene la posibilidad de que haya progreso y desarrollo y que se generen impuestos", señaló el ministro de Minería, Baldo Prokurica.
Chile es el mayor productor mundial de cobre con una producción anual que ronda las 5.6 millones de toneladas, casi un tercio de la producción total.