Foto 2 | Las acciones de la constructora Graña y Montero retrocedieron fuertemente ayer en la Bolsa de Valores de Lima (BVL), tras la suspensión de las negaciones de sus papeles en el mercado bursátil de Estados Unidos. Los papeles de la peruana alcanzaron una caída cercana al 14%. Conforme pasaran las horas continuaron su senda a la baja. Al  promediar la una de la tarde los papeles de Graña y Montero retrocedieron un 8.70% a S/ 2.10. La Bolsa de Nueva York, cabe recordar, suspendió la negociación de las acciones de la constructora peruana Graña y Monteroporque no presentó sus estados financieros auditados del 2017 en los plazos establecidos, dijo el jueves la compañía. (Foto: USI)
Foto 2 | Las acciones de la constructora Graña y Montero retrocedieron fuertemente ayer en la Bolsa de Valores de Lima (BVL), tras la suspensión de las negaciones de sus papeles en el mercado bursátil de Estados Unidos. Los papeles de la peruana alcanzaron una caída cercana al 14%. Conforme pasaran las horas continuaron su senda a la baja. Al promediar la una de la tarde los papeles de Graña y Montero retrocedieron un 8.70% a S/ 2.10. La Bolsa de Nueva York, cabe recordar, suspendió la negociación de las acciones de la constructora peruana Graña y Monteroporque no presentó sus estados financieros auditados del 2017 en los plazos establecidos, dijo el jueves la compañía. (Foto: USI)

El Grupo Graña y Montero alcanzó al tercer trimestre del presente año reducir la deuda total de la compañía a US$ 735 millones, 11% por debajo en comparación al cierre del 2017.

"Este resultado se ha obtenido gracias al plan estratégico de reducción de deuda que la compañía viene implementando desde el año pasado", explicó.

Respecto a las ventas obtenidas se alcanzó un total de US$ 1,133 millones, lo que representa un incremento de 2.3% con respecto al resultado logrado en el mismo ejercicio del año anterior.

Esta cifra viene acompañada por una recuperación del Backlog, el cual se incrementó en 7%, situándose en US$ 2,611 millones, incluidos los negocios recurrentes.

"Esta mejora refleja la confianza de nuestros clientes por la calidad de nuestros servicios y por el valor agregado que le damos a nuestros proyectos", indicó la empresa.

Por su lado, la utilidad bruta alcanzó US$ 180 millones, cifra que es 39% más respecto al mismo ejercicio del 2017 y la utilidad neta se situó en US$ 4.8 millones, es decir 93.5% por debajo del mismo periodo.

La empresa explicó que la diferencia en la utilidad neta se explica principalmente por menores ingresos en el área de Ingeniería y Construcción y Servicios, así como por tener una menor utilidad registrada por ventas de activos, en comparación al año anterior.

Sin embargo, mencionó que se ha logrado un incremento significativo en la utilidad neta respecto a junio del 2018 que había registrado una pérdida de US$ 8.7 millones, con lo cual se obtuvo un incremento de 155% con respecto a dicho ejercicio.

“Todos estos avances aportan a la estabilidad financiera de la compañía y nos confirman que los cambios implementados en la organización son tomados de manera positiva por nuestros grupos de interés. Venimos recuperando la confianza gracias a nuestras acciones”, señaló Luis Díaz, gerente general corporativo del Grupo Graña y Montero.