Google llevó su pelea sobre una multa antimonopolio récord de la Unión Europea a los tribunales de la UE, iniciando un desafío legal que podría tomar años en concluir.

El propietario del motor de búsqueda más grande del mundo dijo que presentó su apelación el lunes ante el Tribunal General de la UE, con sede en Luxemburgo.

El servicio de prensa del tribunal dijo que Google no le había pedido que suspendiera una orden de la UE para que cambie la forma en que muestra los servicios de búsqueda de compras antes de que se pronuncie sobre el desafío.

Los jueces de la UE son el máximo árbitro de los reguladores antimonopolio de la UE que a menudo han recibido apoyo en sus intentos por frenar el comportamiento de las grandes empresas.

La justicia avanza lentamente y cualquier decisión del Tribunal General puede ser apelada ante la más alta corte del bloque, el Tribunal de Justicia de la UE.

Intel esperó ocho años para que se pronunciara sobre su impugnación legal a una multa de 2009, solo para ser informada la semana pasada que el Tribunal General debe volver a examinar el caso.

Google ya ha presentado un borrador a los reguladores sobre los cambios que debe hacer antes del 28 de septiembre para evitar multas adicionales, lo que debería incluir dar igualdad de trato a los rivales.

Ese pedido llegó con una multa de 2,400 millones de euros (US$ 2,900 millones), más del doble que los 1,060 millones de euros aplicados a Intel.

También se espera que los reguladores impongan multas en investigaciones separadas sobre el software de Google para teléfonos móviles, Android, posiblemente tan pronto como el próximo mes, y el servicio de publicidad AdSense.

Margrethe Vestager, máxima autoridad antimonopolio de la UE, también ha amenazado con investigaciones adicionales a los servicios de viajes o mapas.

La Comisión Europea dijo que "defenderá su decisión ante los tribunales", en tanto Google prefirió no comentar detalles de su apelación.