Ente junio y julio, el Chevrolet N300, una furgoneta de carga, se vendió tres veces más que lo registrado durante un mes regular previo a la pandemia. (Foto: César Campos/ GEC)
Ente junio y julio, el Chevrolet N300, una furgoneta de carga, se vendió tres veces más que lo registrado durante un mes regular previo a la pandemia. (Foto: César Campos/ GEC)

El impacto ocasionado por el COVID-19 ha eliminado miles de puestos de trabajo y probablemente incrementará la informalidad en la economía peruana. Marco Kohatsu, gerente general de General Motors, comenta que mucha gente no ha dejado de trabajar y “ahora está buscando emprender por su cuenta”. Agrega que esto también se refleja en la demanda por ciertos vehículos usados para realizar entregas a domicilio y otro tipo de despachos.