Redacción Gestión

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Madrid (Reuters).- El banco español Santander informó que su ganancia neta cayó un 59% en el 2012 hasta los 2,205 millones de euros (3,000 millones de dólares), debido a las fuertes dotaciones exigidas contra su exposición inmobiliaria.

La entidad dijo que las provisiones sumaron 18,800 millones de euros en el 2012, incluidos 6,100 millones destinados a cubrir el total de las coberturas inmobiliarias impuestas por el para acelerar la limpieza de un sector que ha requerido de ayuda financiera europea.

Los once analistas consultados por Reuters esperaban de media una ganancia neta de 2,481 millones frente a los 5,351 millones del 2011.

En una nota de prensa, el presidente del grupo, , aseguró que el 2012 fue un año de inflexión y que en el 2013 se verá "un fuerte aumento de resultados, una vez terminados los saneamientos especiales", declaraciones similares a las realizadas a la revista británica The Banker a principios de año.

El margen de intereses del banco subió un 3.6% el año pasado a 30,147 millones de euros, frente a una previsión media de 30,313 millones de euros.

La tasa de morosidad de Santander en España escaló al 6.74%, desde el 6.38% de septiembre y frente una media del sector del 11.38%. A nivel de grupo, la mora se situó en el 4.54% frente al 4.33% de setiembre.

En el cuarto trimestre, las utilidades de Santander mejoraron exponencialmente porque hasta setiembre ya se había cubierto el 90% del riesgo inmobiliario en España.

Así, el resultado atribuido entre octubre y diciembre alcanzó los 401 millones de euros, frente a 47 millones en el mismo período del 2011 y los 662 millones que esperaban los analistas consultados.

Por áreas de negocio, Latinoamérica representó la mitad del beneficio del grupo en el 2012, destacando Brasil, que aporta la cuarta parte del beneficio, y México (un 12%), mientras que Europa contribuyó con el 27% del resultado, siendo la aportación de España del 15%.

Santander reveló también que ha decidido devolver ya 24,000 millones de euros al del dinero tomados en la primera subasta de liquidez (LTRO), mientras que mantienen los 11,000 millones de euros tomados en la segunda subasta.