Tras un año en el que pusimos el contador a cero, los negocios miran hacia delante para explorar las oportunidades que se presentan tras la incertidumbre. La forma en que los consumidores perciben los productos y experiencias se ha visto modificada, lo que ha cambiado por completo las prioridades y el consumo a nivel global.
La sombra de la incertidumbre, la saturación emocional y el anhelo de días más felices seguirán presentes en el 2023 y la forma en que nos sentimos tendrá un mayor impacto en cómo gastamos, según el informe “El consumidor del futuro 2023”, publicado por WGSN, empresa de pronósticos de tendencias.
Las marcas y retailers deben adaptarse a unos consumidores que ocupan dos espacios al mismo tiempo: el hogar físico y el mundo digital. “Las barreras entre el comercio físico y digital van cayendo, y las marcas deben adaptarse rápidamente. Si no acude donde están sus clientes, lo hará otro”, asegura Andrea Bell, directora de WGSN Insight.
Según WGSN, cuatro perfiles de consumidor moldearán el mundo que nos rodea a raíz de esta coyuntura: los previsores, los nuevos románticos, los inconformistas y los dinamizadores. “Una planificación cuidadosa, una mente abierta y un enfoque flexible serán cruciales para la supervivencia futura de todas las marcas y empresas”, apunta Carla Buzasi, presidenta y directora ejecutiva de WGSN.
Los perfiles
1. Los previsores: La fatiga emocional, la incertidumbre económica y la noción distorsionada del tiempo han hecho mella en los previsores. Este grupo cauto desea estabilidad y seguridad y solo pueden lidiar con una interferencia óptima.
Para este grupo de consumidores, WGSN sugiere presentar innovaciones de retail, como la tecnología de relleno de productos en tienda; el retail bajo pedido, en preventa y por suscripción; los programas de entregas semanales, y los nuevos modelos de descuento y de fidelización.
2. Los nuevos románticos: El aumento de la carga laboral y una profunda necesidad de reconectar con sus emociones son los impulsores de los nuevos románticos, un grupo que está redefiniendo el sentimiento colectivo.
WGSN recomienda productos, servicios e iniciativas que ayuden a la población a crear lazos emocionales más fuertes con sus mundos internos y externos, como apostar por materiales naturales y crear productos sostenibles que ofrezcan un momento sensorial, fomenten la creación de rituales de uso y mejoren el bienestar.
3. Los inconformistas: Motivados por la ira de 2020 y la falta de asistencia institucional y gubernamental, este grupo de activistas recurre a la tecnología y a sus compañeros para reconstruir un mundo mejor. En el 2023, la ‘cultura de la cancelación’ evolucionará para centrarse en la diversidad, pues los inconformistas apoyan a las compañías y comunidades en este espacio.
Las empresas pueden centrarse en llamar a la acción, el progreso continuo y el cambio a largo plazo genuino para atraer a los inconformistas. También pueden desarrollar productos transculturales, incorporar la sabiduría indígena y modelos de inversión directa.
4. Los dinamizadores: La flexibilidad cognitiva de este grupo propicia que sean muy resilientes. Multidimensional, polifacético y siempre involucrado en múltiples tareas a la vez, este grupo busca emociones fuertes, absorbe nuevos estímulos neuronales y busca momentos sumamente sensoriales, lo que dará lugar a la siguiente ola de profesiones mixtas.
Una estrategia empresarial es inviertir en experiencias innovadoras, aventuras virtuales y mundos mixtos. Por ejemplo, se puede explorar el retail gamificado, el e-commerce interactivo, los mercados del metauniverso y los nuevos reinos del tercer espacio, donde los consumidores se comunican, juegan, compran, aprenden y trabajan.